Los estudiantes universitarios de Colombia comenzaron a tomar este jueves las calles de Bogotá, capital colombiana, para exigir el retiro definitivo del proyecto de reforma de ley de Educación Superior que está radicado desde octubre pasado en el Congreso y que a su juicio tiene un marcado caracter privatizador.
La movilización se da luego de que el Gobierno condicionara el retiro del proyecto al fin del paro, pues los estudiantes aseguran que el anuncio realizado por el presidente Santos no es ninguna garantía porque el instrumento legal sigue cursando en el Congreso.
Según los jóvenes esta reforma no garantiza el fortalecimiento de la universidad pública.
De acuerdo con los organizadores de la marcha, al menos 150 mil personas participan en la jornada. Para este evento han sido llamados a protestar estudiantes, profesores, indígenas, obreros y familiares.
A esta movilización se han sumado también organizaciones sindicales como la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Asociación Distrital de Educadores (ADE) y la Federación Colombiana de Educadores (Fecode).
La corresponsal de teleSUR en Colombia, Angie Camacho informó este jueves que los estudiantes de educación media también se han sumado a la protesta que se lleva a cabo en Bogotá.
La periodista entrevistó a uno de los jóvenes de secundaria de nombre Jorge Ovallo quien expresó que «los estudiantes de secundaria protestamos porque sabemos que somos los futuros universitarios. A nosotros no se nos consultó esta norma y le decimos al señor Santos que el paro no va a terminar».
«Es la gente la que tiene que crear una propuesta de educación superior (…) Todos vamos a seguir movilizados hasta que se caiga esta reforma, y si no se cae vamos a un paro cívico nacional», manifestó el joven colombiano.
Se prevé que al menos 10 movilizaciones recorran la capital colombiana para encontrarse finalmente en la plaza Bolívar de Bogotá.
La alcaldesa de la ciudad, Clara López Obregón, indicó que entre las medidas establecidas para garantizar la seguridad durante las movilizaciones, en Bogotá habrá un refuerzo de dos mil 500 uniformados.
“Hoy tenemos un refuerzo policial importante para garantizar tanto el derecho de la movilización que ordena la Constitución, y de igual forma el orden que deben guardar los manifestantes que también lo ordena la Constitución”, dijo López.
Con esta marcha los universitarios mantendrán el paro nacional decretado desde el pasado 12 de octubre. De acuerdo con el líder estudiantil Jairo Rivera, miembro de la Mesa Ampliada Nacional Estudiantil (MANE), la fecha para adoptar una decisión frente a la propuesta del mandatario colombiano será analizada el próximo sábado.
Santos condicionó este miércoles el retiro del proyecto, tras una solicitud de la directiva de su agrupación política, el Partido de la U, sólo si los estudiantes detenían el paro estudiantil.
Rivera indicó que el venidero sábado se dará una respuesta al pronunciamiento de Santos y reiteró que la MANE es la única autorizada para definir cuál será el rumbo de la movilización universitaria en Colombia y las propuestas a enviar al Ejecutivo.
Asimismo, enfatizó que “nuestra marcha será pacífica y sólo pedimos que el Gobierno retire definitivamente la reforma del Congreso y entre todos construyamos una nueva iniciativa que favorezca a los estudiantes del presente y el futuro del país”.
Construir un proyecto desde la Universidad
Por su parte, Sergio Fernández de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), explicó que la llamada “Toma de Bogotá” se da porque la apuesta del movimiento de protesta es por «la construcción de un proyecto desde la universidad».
Juan Sebastián López, representante de la MANE, informó que para el próximo 12 y 13 de noviembre está previsto un Encuentro Nacional Programático para la construcción de una propuesta alternativa de Reforma a la Educación Superior.
El encuentro se estructurará en seis mesas de trabajo: Financiación, Democracia y autonomía, Bienestar, Calidad académica, Libertades democráticas y Relación universidad-sociedad.
Los estudiantes exigen al Gobierno de Santos el retiro de la citada iniciativa por su marcado carácter privatizador, construir propuestas alternativas y desmilitarizar los centros educativos, así como el respeto a las movilizaciones.
El Gobierno colombiano a través del Ministerio de Educación sostiene que la reforma a la polémica Ley 30 “no privatizará la educación pública, no la convertirá en una mercancía, no incrementará las matrículas ni afectará la autonomía”.
Según el Ejecutivo, los recursos para el sector serán superiores a los 11 billones de pesos (unos cinco mil 754 millones de dólares) en los próximos diez años, con lo que se podrá “garantizar” la creación de 600 mil nuevos cupos para los jóvenes de escasos recursos de aquí al 2014.