Al alza del monto a abonar por tarifas se le suma la carga tributaria nacional, provincial y municipal
Por Silvia Stang | LA NACION
Los usuarios verán incrementado el monto a pagar por los servicios de electricidad, gas y agua no solamente por lo que implica en sí misma la quita de los subsidios. Hay un efecto adicional que se derivará de esa decisión y es que aumentará el monto sobre el cual se calcula la carga tributaria, según advierte un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).
Aunque hay algunas diferencias según la jurisdicción, es usual que las alícuotas de las obligaciones con el fisco se apliquen, hoy por hoy, sobre la cifra de la factura neta del subsidio, cuya eliminación provocará, lógicamente, que los cargos tributarios impacten sobre la tarifa total. Ese efecto, que se dará por ejemplo en la Capital Federal, no está contemplado cuando, en las facturas, se detalla de cuánto sería el valor del servicio a pagar sin la ayuda estatal.
Así, por un lado, se producirá una suba adicional de lo que deberá abonar cada contribuyente, que equivaldrá como mínimo al 21% del subsidio eliminado (ésa es la alícuota del IVA). Y, por otro lado, el fisco, tanto nacional como en muchos casos los provinciales o municipales, se nutrirán con más recursos. El gobierno nacional tendrá, de esta manera, una doble vía por la que conseguirá más dinero para cubrir los problemas que muestra la situación fiscal: dejará de girar fondos para subsidios y, al mismo tiempo, recaudará más por el impuesto al valor agregado (IVA).
El informe elaborado por el Iaraf ofrece un ejemplo aplicable a los habitantes de la ciudad de Buenos Aires. En el caso en cuestión, el usuario del servicio de electricidad paga por mes $ 31,10 y tiene un subsidio de $ 57. De la primera cifra, $ 6,80 corresponden a la carga impositiva, que incluye el IVA (21%), el aporte para el Fondo Provincial Santa Cruz (0,6%) y una contribución municipal (6,38%). Esas alícuotas están calculadas sobre $ 24,30, que es el valor del servicio con subsidio.
Al eliminarse la totalidad del aporte de fondos públicos para subsidiar el consumo, las tasas serán aplicadas sobre $ 81,30 y, entonces, el componente impositivo se elevará a $ 22,80, lo que llevará la factura total a $ 104,10. Así, la familia deberá abonar finalmente un 234,7% más que hasta ahora. De los $ 73 que implica ese incremento, 57 corresponden a la eliminación del subsidio y 16 a mayores tributos. Dicho de otra forma, y según detalla el estudio, por cada $ 100 que se eliminen de subsidio, hay que sumar $ 28 por los tributos nacionales o de otro nivel.
Lo mismo ocurre, por ejemplo, en el caso de AySA, la empresa distribuidora de agua, según pudo observar La Nacion. En una factura de $ 116,38, de los cuales $ 86,54 corresponden al subsidio, las tasas e impuestos que suman un 23,67% son estimadas hasta ahora sobre el monto neto de la contribución del Estado, en este caso, de $ 29,84. Al hacerse la cuenta sobre la tarifa total, el monto de impuestos pasará a ser de $ 27,55, en lugar de los $ 6,84 actuales. En síntesis, el usuario pasará a pagar $ 143,93, una tarifa que supera en un 292,4% a la actualmente abonada, de $ 36,68. Los recursos que serán directamente percibidos por el fisco, en tanto, se incrementarán en un 302,8 por ciento.
El informe del centro de estudios que dirige el economista Nadin Argañaraz destaca que a nivel provincial el impuesto más común cargado en las facturas de servicios públicos es el de ingresos brutos. Recuerda que «en el marco de las privatizaciones se estableció que todo incremento de alícuota podría ser trasladado de manera legal al consumidor». A su vez, hay varios municipios que cobran tasas al consumo de energía o gas natural. Por último, hay otros tributos menores, que responden a hechos diversos, como el caso del cargo ya mencionado que aportan los ciudadanos porteños para la provincia de Santa Cruz.
DIFERENCIAS POR JURISDICCIÓN
El criterio de cálculo de la carga tributaria no es igual en todas las jurisdicciones. En el caso de la ciudad de Córdoba, comenta el informe, el IVA está estimado como un porcentaje de la tarifa total. La misma factura, sin embargo, toma otro criterio para calcular las tasas municipales.
De esta manera, por cada $ 100 de eliminación de subsidios en la factura de la electricidad, los cordobeses deberán afrontar una suba para sus bolsillos de $ 110, por el efecto de los tributos de índole local.
En rigor, la magnitud del efecto sobre la recaudación fiscal, en todos los casos, dependerá de cómo reaccionen los consumidores ante las fuertes subas previstas.
Mientras tanto, en los próximos días, el Gobierno anunciaría la continuidad del programa de quita de subsidios, extendiendo la medida a otras zonas geográficas, más allá de los barrios porteños que fueron objeto del primer anuncio (Barrio Parque y Puerto Madero). Hasta anoche, 12.105 usuarios habían adherido a la renuncia voluntaria a los subsidios, una cifra que los funcionarios no mirarían con demasiada satisfacción respecto de lo que se esperaba.
21%
Estado nacional
Sobre el total del subsidio quitado, ése es el porcentaje que obtendrá el fisco en concepto de IVA.
28%
Carga en electricidad
Es el peso total de los tributos en el caso de una factura de luz para los habitantes de la Capital Federal.
RATIFICAN EL AUMENTO DE LA LUZ EN CORDOBA
CORDOBA.- A pesar de las amenazas del gobierno nacional de aplicar sanciones a las provincias que aumenten las tarifas de electricidad, el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, ratificó el ajuste del 28% que aplicará en forma desdoblada (en diciembre y en febrero) la Empresa Provincial de Energía (EPEC). El mandatario afirmó que el ajuste fue pedido por la compañía estatal y aprobado en audiencia pública. Schiaretti se mostró a favor de la quita de subsidios a los consumidores de alto poder adquisitivo. Se calcula que una familia con un consumo bimestral de 890 kilovatios que paga $ 351 pasaría a pagar $ 939 desde febrero