Tel Aviv, 22 oct (PL) Militares estadounidenses e israelíes entraron de lleno hoy en maniobras militares conjuntas en medio de una tensión creciente en Levante por el diferendo nuclear con Irán y el conflicto armado en Siria.
Los juegos de guerra estaban programados para comenzar en abril pasado, pero el mando militar estadounidense los pospuso, según todos los indicios, para evitar verse involucrado en una conflagración con Irán debido a la posibilidad de que uno de los misiles disparados por Israel impactara en territorio iraní.
En aquellos momentos el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, insistía en la necesidad de lanzar un golpe militar masivo contra la República Islámica «para eliminar el peligro» de que ese país se dotara con armas atómicas, una postura que ha relajado, aunque mantiene, en las últimas semanas.
Otro tema de inquietud es la proximidad de los ejercicios a territorio sirio, donde grupos armados que cuentan con el apoyo de Estados Unidos, sus aliados atlánticos y Estados árabes, tratan de derrocar al gobierno del presidente Bachar el Assad.
En septiembre pasado las tropas israelíes desplegadas en las Alturas de Golán, territorio sirio ocupado, realizaron maniobras militares; en Jordania, soldados estadounidense fueron movilizados en la frontera con Siria.
Los actuales juegos de guerra están basados en el supuesto de un ataque con cohetes desde varios flancos y el funcionamiento de las defensas antimisiles de Israel para enfrentar esa eventualidad e involucran a fuerzas navales de Estados Unidos en el Mediterráneo.
Acorde con las precisiones tres mil 500 militares estadounidenses toman parte en el ejercicio coordinados con mil israelíes, encargados de operar los sistemas coheteriles de la serie Patriot, de fabricación norteamericana, y los del Domo de Hierro, creados por Tel Aviv.
El emplazamiento de los sistemas estadounidense Patriot en Israel data de las postrimerías de la resistencia del gobierno del expresidente iraquí Saddam Hussein contra la invasión militar de Estados Unidos en 2003, diseñada para destruir unas armas de destrucción masiva que nunca fueron encontradas.
En el debate público de días atrás con su rival del partido republicano, el vicepresidente norteamericano, Joe Biden, aseguró que «Irán está a años de poder fabricar una bomba atómica».
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