FM Cosmos

Últimas noticias: San Juan, Argentina hoy

Las elecciones en Cataluña abren un complejo escenario de pactos

Los independentistas presionan al debilitado Artur Mas. El gobierno español de Mariano Rajoy celebró el revés electoral del plan soberanista del presidente catalán.

 BARCELONA, España.- Las elecciones regionales celebradas el domingo en Cataluña abrieron un escenario político complejo, en el que el líder nacionalista y presidente regional, Artur Mas, tendrá que pactar con otras fuerzas al quedar lejos de la mayoría absoluta que buscaba al adelantar los comicios.

Los resultados obtenidos por Convergencia i Unió (CiU), la coalición que lidera Mas -ganó los comicios pero perdió doce diputados-, fueron valorados por las principales fuerzas políticas españolas como un fuerte revés para el presidente catalán.

Mas, que tenía una holgada mayoría de 62 diputados en un parlamento de 135 escaños, se quedó en los comicios con 50 parlamentarios tras adelantar dos años las elecciones para iniciar un proceso que contempla la convocatoria de un referéndum sobre el estatus futuro de Cataluña con respecto a España.

Pese a reconocer que los resultados le restaron fuerza para liderar en solitario esa vía, Mas confirmó la noche del domingo que mantiene su plan.

La gran beneficiada de la jornada electoral fue ERC, una formación de izquierda, republicana e independentista, que pasó de 10 escaños a 21.

Este resultado la convierte en la segunda fuerza parlamentaria catalana, desplazando de esa posición al Partido Socialista, que se quedó en 20 escaños al perder 8 diputados.

El líder de ERC, Oriol Junqueras, aseguró ayer que su partido no se plantea formar parte del próximo gobierno catalán, aunque se declaró dispuesto a pactar una agenda de objetivos con CiU que incluya el mantenimiento de la «vía soberanista» propuesta por Mas, con un referéndum de autodeterminación.

En una conferencia de prensa, Junqueras expuso sus «condiciones», que resumió en «una agenda nacional clara y explícita (apoyo a la celebración de un referéndum) y un cambio económico», centrado en «un reequilibrio de la presión fiscal» para centrarlo en los que tienen «más recursos», y menos recortes sociales.

En su valoración de los resultados, destacó que «dentro del bloque soberanista hay un desplazamiento hacia el partido que ha hablado de independencia de forma más explícita, que es ERC, y desde el ámbito ideológico hay un desplazamiento desde el centro-derecha hacia el centro-izquierda».

Inestabilidad

El Partido Popular (PP), que gobierna en España, pidió ayer a Artur Mas que rectifique sus planes soberanistas.

En palabras del líder ‘popular’ y presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, citado por la «número dos» del PP, María Dolores de Cospedal, la estrategia de Artur Más con el adelanto electoral fue un «fiasco».

En una conferencia de prensa en Madrid, Cospedal destacó que el presidente catalán «ha sido el mejor agente electoral de ERC».

Acompañada por Alicia Sánchez Camacho, la candidata del PP en Cataluña, que logró subir en un escaño la representación ‘popular’ en el parlamento regional, consideró «extremadamente complicado» que su partido llegue a dar su apoyo a CiU.

Para Sánchez Camacho, Mas, al adelantar las elecciones, llevaron a Cataluña a una situación de «mayor inestabilidad» en la que un eventual pacto CiU-ERC «radicalizaría la política catalana».

Identidad

El Partido Socialista, desplazado por los independentistas de ERC del tradicional segundo puesto que han ocupado en Cataluña, uno de sus grandes viveros de votos en las elecciones generales, pidió ayer a CiU que recupere «sus señas de identidad».

El líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba, también hizo hincapié en el escenario complicado que se abre en Cataluña y evitó pronunciarse sobre un eventual pacto de su partido con Mas, responsabilidad que dejó en manos de la rama catalana de su formación.

El Partido Socialista, ante el plan soberanista del presidente catalán, defendió en su campaña una España federal y la posibilidad de una consulta si se celebra dentro del marco de la legalidad.

El Gobierno español recordó al presidente catalán cuando presentó su plan con la convocatoria de un referéndum que esa consulta no está contemplada dentro de la Constitución y que, en todo caso, tendría que hacerse a todos los españoles.

La configuración del arco parlamentario catalán, con siete partidos, permite a CiU buscar pactos con al menos tres grupos: ERC (21 escaños), los socialistas (20) y el PP (19), con los que alcanzaría la mayoría necesaria que le negaron las urnas, aunque con condiciones muy diferentes con cada uno de ellos.

Comments

comments