Los uniformados, que en las últimas horas aceptaron una oferta salarial del Gobierno, por causas que se desconocen dispararon balas de goma y gases contra los vecinos que pedían seguridad, entre los que se produjeron algunos heridos.
Inesperadamente, intervinieron efectivos de Gendarmería en un intento de disuadir a los manifestantes, y así lograron evitar que continuara la represión.
Unas dos horas antes, el gobernador José Alperovich había confirmado el acuerdo salarial con la policía, que aceptó la suba de más de 8 mil pesos.
TENSIÓN DE MADRUGADA
El conflicto con los policías en Tucumán terminó de arreglarse. Pero la caótica situación que viven los barrios de la perfieria de la capital de esa provincia está lejos de arreglarse. Los usuarios publicaron imágenes en TN y la Gente de las barricadas que hacen en las esquinas por temor a los robos y saqueos, ya no a comercios sino a sus propias casas.