Si las empresas no acceden al pago de un bono de fin de año, muy probablemente los choferes de colectivos de corta y larga distancia realicen un paro como medida de fuerza.
El titular del gremio UTA, Roberto Fernández advirtió que la erosión de los salarios producto de la alta inflación merece una compensación, a través de un bono que debería tener el tope de $4.000.
Esto mismo fue debatido en una reunión que el miércoles mantuvieron dirigentes sindicales, tanto oficialistas como opositores (ver nota relacionada).
Fernández también advirtió que, como consecuencia del impuesto a las Ganancias, “el aguinaldo lo vamos a perder completamente”.
«Si no hay razonamiento, esto enoja y vamos a tener que salir a la calle para defender esta situación que vivimos todos los trabajadores y el pueblo en general. Acá se trata de sentarse en una mesa y encontrar un entendimiento», dijo el líder de UTA en diálogo con radio El Mundo, al aludir a eventuales medidas de fuerza.
Los salarios de los choferes de colectivos están ligados a los subsidios que otorga el Estado a las empresas de transporte para mantener bajas las tarifas. El pago de un bono podría demandar una mayor erogación por parte de las arcas estatales, ya que no está previsto, a esta altura del año, un nuevo aumento en el valor del boleto.
Por otro lado, debería prestar el Gobierno principal atención a la posibilidad de un paro de este medio de transporte por su altísimo impacto en la vida cotidiana de las personas.
Cabe recordar que el paro general del 10/04 tuvo una enorme contundencia por la adhesión de los choferes de colectivos.
«Debido a la inmensa inflación que estamos viviendo todos los argentinos buscamos un bono de todos los sindicatos, el que debería tener un tope de $4.000”, dijo Fernández.
«Cada uno tiene que discutir con sus representantes la cantidad exacta, si es un poco más o un poco menos», remarcó.
«Hicimos una evaluación de todo el año y nos encontramos con que esta situación se hace complicada para los trabajadores», alertó el jefe de los colectiveros.
Y cuestionó al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, que la semana pasada aseguró que los salarios aumentaron por encima de la inflación.
«Está equivocado al decir que los salarios no perdieron poder adquisitivo. El tema principal es el Impuesto a las Ganancias. El aguinaldo lo vamos a perder completamente. El Gobierno tiene que tener consideración y comprender que si perdemos el aguinaldo, con el bono recuperaríamos una parte de nuestros ingresos debidamente bien ganados», dijo el sindicalista.