Con información sobre irregularidades en el manejo de los fondos en la provincia, ni bien asumió el gobierno de Jujuy, el 10 de diciembre, Gerardo Morales pidió un informe a la Auditoría General de la Nación (AGN), el organismo de control externo del Congreso, para que investigue las cuentas públicas al momento de asumir la administración. La auditoría se hizo en tiempo récord y el informe fue aprobado el último miércoles por el Colegio de Auditores, que integran representantes del oficialismo y la oposición. La conclusión fue unánime: se pagaron 29 millones de pesos a cooperativas dependientes de la agrupación Túpac Amaru, que lidera Milagro Sala, sin acreditar la construcción de las obras encargadas. Se trataba de un programa de viviendas sociales asignado por el Ministerio de Planificación en 2015, antes del fin de la era kirchnerista, cuando esa cartera estaba al mando de Julio de Vido.
El dato destacado es que entre los cuatro votos de la AGN que aprobaron el informe está incluido el de su presidente, Ricardo Echegaray. El ex titular de la AFIP, se sabe, llegó allí por imposición de Cristina Kirchner a las autoridades del PJ, que debían cubrir el cargo que le corresponde al principal partido de la oposición.
El informe detalla irregularidades en el programa de viviendas sociales “Mejor Vivir II”, suscripto entre la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda del Ministerio de Planificación Federal y el Instituto de Vivienda y Urbanismo de Jujuy, “para la construcción de unas 1000 viviendas” en los municipios de San Salvador de Jujuy, San Pedro, Perico, Monterrico, Palpalá y El Carmen.
“Tenemos comprobado que ese dinero no se destinó a ninguna construcción de vivienda”, aseguró el auditor por la UCR Alejandro Nieva. “Las cooperativas que cobraron por viviendas que nunca construyeron tenían el mismo domicilio, que coincide con el de la Túpac Amaru y designaban un mismo representante para que cobre por todas. Era una operatoria sistemática, hacían figurar muchas cooperativas pero era una sola”, aseguró Nieva.
Esos datos coinciden con la investigación del fiscal de Estado jujeño, Mariano Miranda, quien impulsó la denuncia por fraude a la administración pública y asociación ilícita por la que está detenida Milagro Sala. El fiscal pide que se incorporen a la causa una serie de videos que muestra a militantes de la Túpac Amaru cobrando los cheques en entidades bancarias (ver aparte).
La Auditoría pudo corroborar que se pagaron más de 3 millones de pesos a través de una cuenta del Banco Nación “en 72 cheques, de 50 mil pesos, con lo cual, podían sacar físicamente los billetes para luego utilizar el efectivo”. En el informe se lee además que “los libramientos de pagos” no estaban “firmados por las autoridades intervinientes” y al constatar “el estado de las obras” e indagar a los vecinos “ninguno de los mismos” tenía conocimiento de ser beneficiario del plan. Además “tampoco se observaron avances de obras en el lugar por ninguna de las cooperativas involucradas”. Ese dinero forma parte de los 29 millones de pesos que según la auditoría fueron enviados desde Nación y cobrados por las cooperativas sin haber prestado el servicio comprometido.
Según detalla la AGN “no se obtuvo documentación referida a las organizaciones que ejecutarían la obras, ni del responsable técnico, ni de los beneficiarios finales, ni de la localización geográfica precisa del obras”. El dinero se retiró entre el 3 y el 9 de diciembre, los últimos días de gestión del gobernador K Eduardo Fellner.
fuente CLARÍN