FM Cosmos

Últimas noticias: San Juan, Argentina hoy

«Todos contra todos», la consigna del debate de Carrió, Filmus, Lousteau, Tombolini y Ramal

Cambiaron las reglas. Pero las chicanas, el intercambio de acusaciones y el repaso cruzado de trayectorias políticas y legislativas volvieron a ser protagonistas. Los primeros candidatos a diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires protagonizaron el único debate que tendrá la campaña rumbo a las elecciones legislativas del 22 de octubre.

Durante casi dos horas, Elisa Carrió (Vamos Juntos), Daniel Filmus (Unidad Porteña), Martín Lousteau (Evolución), Matías Tombolini (1 País) y Marcelo Ramal (Frente de Izquierda y los Trabajadores) discutieron sobre educación y desarrollo humano, economía y relaciones exteriores y seguridad y derechos humanos en A dos voces, el programa de TN.

A diferencia de ediciones anteriores, esta vez el debate incluyó preguntas directas entre los candidatos. Así, terminadas las exposiciones individuales sobre los ejes temáticos, cada postulante pudo elegir a uno de sus rivales para hacerle una pregunta y luego repreguntar. Fue durante esos intercambios cuando ocurrieron los cruces más filosos de la noche.

El pasaje más tenso se dio cuando, hacia el final, en el bloque dedicado a justicia y derechos humanos, irrumpió la desaparición de Santiago Maldonado, de la que ya pasaron más de 70 días. «La votó la mitad de la ciudad de Buenos Aires. Me hubiera gustado escucharla hablar de Santiago Maldonado», le enrostró Ramal a Carrió. «Quiero la aparición con vida [del joven]», retrucó Carrió. «No sé si está en Chile. Hay un 20 por ciento de posibilidades de que este chico esté en Chile con el RIN», añadió en alusión al grupo conocido como Resistencia Ancestral Mapuche (RAM). Además, la candidata de Cambiemos volvió a defender a Patricia Bullrich y reiteró: «Estoy segura de que el Gobierno no tiene nada que ver».

También Filmus habló de la desaparición de Maldonado, pero el eje central de sus intervenciones fue pedir el voto para «frenar el ajuste de Macri» que, aseguró, «se va a profundizar» después de las elecciones con un nuevo aumento de tarifas. Un discurso alineado con el de Cristina Kirchner.

Los cinco candidatos, -Luis Zamora, de Autodeterminación y Libertad desistió de participar en medio de denuncias contra uno de los conductores del programa, Marcelo Bonelli-, se sacaron chispas enrostrándose su pasado político. Carrió recordó que Filmus fue funcionario de Carlos Grosso y lo acusó de haber apoyado la reforma educativa del menemismo. El ex ministro de Educación la desmintió. Además, le recordó sus denuncias contra Macri y se preguntó cómo había hecho para «saltar» de Pino Solanas a Macri en cuatro años. «Creo en la redención de Macri respecto de su padre. Creo que puede cambiar y lo voy a ayudar a que cambie», devolvió la diputada de Cambiemos.

Tombolini cuestionó a Lousteau por su «falta de coherencia» tras recordar su paso por el duhaldismo, el kirchnerismo, UNEN y la embajada en Estados Unidos en representación del gobierno actual. «¿Vas a volver a renunciar a la banca para ser candidato en 2019 como hiciste para ser embajador?», lo desafió. «Es extraño que me digas eso vos, viniendo de la fuerza que lidera Massa que fue candidato testimonial», disparó Lousteau.

Como es habitual en este tipo de escenas, Carrió jugó cómoda un juego que conoce bien. Se salteó las reglas, dijo que lo hacía para que el debate fuera «más divertido», se quejó por no poder hablar en cualquier momento y hasta reconoció haberse «tildado» cuando le tocaba preguntarle a Tombolini sobre economía. «No tengo nada que preguntarte. Me parece bien que la gente joven se involucre», soltó.

Las pausas, tres en total, sirvieron para que los candidatos recibieran consejos de sus asesores y compañeros de lista. A Ramal lo acompañaron Néstor Pitrola y Myriam Bregman. Gisela Marziotta no se separó de Filmus y Lousteau escuchó los consejos al oído de Débora Pérez Volpin. A Tombolini lo rodearon Victoria Donda y Marco Lavagna. Carrió aprovechó los intervalos, nunca más de dos minutos, para escaparse y darle un par de pitadas a un cigarrillo. Siempre escoltada por Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli.

fuente LA NACION

Comments

comments