El oficialismo y el peronismo terminaron por sellar un reparto de comisiones en la Cámara de Diputados y en el Senado que, desde el punto de vista político, favoreció al peronismo que responde a los gobernadores por sobre la bancada kirchnerista, que es la segunda fuerza de la Cámara baja.
En efecto, si bien en el reparto de las 45 comisiones permanentes el bloque peronista recibió menos presidencias, estas tienen un mayor peso político que las otorgadas al kirchnerismo si se toma en cuenta los escenarios en los que el Gobierno pretende dar el debate legislativo durante este año.
La distribución de comisiones en el Senado ya se había definido en febrero último, en reuniones en las que los bloques de Cambiemos y Justicialista, que preside Miguel Pichetto, se repartieron en partes iguales las presidencias de las comisiones y las cuotas de poder en el manejo de la Cámara alta.
Así, de las 27 comisiones permanentes del Senado, oficialistas y peronistas se quedaron con 10 presidencias cada una, en sintonía con el empate en la condición de primera minoría que mantienen ambas bancadas, integradas por 25 miembros.
El kirchnerismo, en tanto, solo presidirá tres comisiones, un número acorde a sus ocho senadores.
La distribución de las presidencias de comisiones se hizo en Diputados según el nuevo esquema de mayorías y minorías que surgió de las elecciones del año pasado.
En su condición de primera minoría, Cambiemos se quedó con 21 comisiones: once serán presididas por Pro, ocho por la UCR y dos por la Coalición Cívica.
Por el oficialismo pasará el manejo de las comisiones más importantes, que seguirán con los mismos presidentes: Presupuesto y Hacienda (Luciano Laspina), Relaciones Exteriores (Cornelia Schmidt Liermann), Asuntos Constitucionales (Pablo Tonelli), Juicio Político (Álvaro González) y Justicia (Diego Mestre).
Daniel Lipovetzky y Gabriela Burgos continuarán al frente de las comisiones de Legislación General y de Legislación Penal, las que encabezarán a partir de la semana próxima el debate por la despenalización del aborto; discusión en la que también participará la Comisión de Salud, que hasta el año pasado estuvo en manos del kirchnerismo y ahora estará presidida por la diputada ultramacrista Carmen Polledo.
La cuarta comisión participante, la de Familia, Mujer y Minoridad, estará en manos de otra oficialista: Alejandra Martínez.
Por su parte, el kirchnerismo quedó con la presidencia de 13 comisiones, entre las que se destacan Defensa (seguirá al frente Nilda Garré) y Energía y Economía (Axel Kicillof).
En tanto Leopoldo Moreau, Daniel Filmus y Daniel Scioli, que ingresaron en la Cámara el 10 de diciembre pasado, presidirán las comisiones de Libertad de Expresión, Cultura y Deportes, respectivamente.
El interbloque Argentina Federal, tercer bloque en importancia numérica e integrada por legisladores peronistas no kirchneristas, tendrá a su cargo siete comisiones, entre ellas la de Legislación del Trabajo (que será clave para la discusión de la nueva reforma laboral que promueve el Gobierno); Comunicaciones (protagonista en la nueva ley de medios que quiere presentar el Gobierno); Obras Públicas; Comercio, Pyme y Asuntos Municipales.
Desafuero
En el Senado, todas las miradas se centraron en la presidencia de Asuntos Constitucionales, que tendrá la misión de definir el pedido de desafuero de la expresidenta Cristina Kirchner presentado por el juez federal Claudio Bonadio en la causa por el memorándum con Irán. La comisión será presidida por el peronista Dalmacio Mera (Catamarca), que reemplazará al hiperkirchnerista Marcelo Fuentes.
El peronismo que conduce Pichetto también retendrá las comisiones de Justicia y de Acuerdos (repiten Pedro Guastavino y Rodolfo Urtubey en la presidencia).
A pesar de la gran elección del año pasado, de las comisiones claves el oficialismo solo logró alzarse con la de Presupuesto y Hacienda (Esteban Bullrich), aunque casi duplicó el número de presidencias que tendrán sus senadores.
fuente LA NACION
