El escándalo con el intendente de Paraná, Sergio Varisco, continúa creciendo. El dirigente de Cambiemos fue procesado este lunes por vínculos con el narcotráfico y deberá depositar un millón de pesos para no ir preso.
La noticia fue confirmada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, lo que confirma que -como explicó LPO- el gobierno nacional le soltó la mano a Varisco, que integra la Mesa de Conducción de la UCR nacional.
«Quien se ponga del lado equivocado tendrá su castigo. Para nuestro gobierno no existen amigos ni privilegios que nos frenen en nuestro camino hacia una Argentina Sin Narcotráfico», tuiteó esta mañana Bullrich, antes de que la noticia trascendiera en los medios.
El escándalo con Varisco por su presunta vinculación con una banda narco de la capital entrerriana se agigantó el mes pasado con el allanamiento de su casa, la municipalidad y otras dependencias. En los primeros días de junio, la Justicia detuvo a una funcionaria municipal y a un concejal de Cambiemos.
El Intendente de Paraná, Sergio Varisco, acaba de ser procesado por vínculos con el Narcotráfico.
Quien se ponga del lado equivocado tendrá su castigo. Para nuestro gobierno no existen amigos ni privilegios que nos frenen en nuestro camino hacia una Argentina Sin Narcotráfico.
El procesamiento de Varisco fue dispuesto por el juez federal Leandro Ríos, que además le impuso una caución real de un millón de pesos para mantener su excarcelación. El magistrado además confirmó la prisión preventiva del concejal Héctor Pablo Hernández y la funcionaria Griselda Bordeira.
Según el medio local Análisis Digital, el juez Ríos consideró a los acusados coautores penalmente responsables del «delito de financiamiento de actividades de comercio de estupefacientes, en concurso ideal», como así también peculado, por el uso de fondos municipales.
El magistrado también dispuso el procesamiento de Daniel «Tavi» Celis, el presunto jefe de la banda narco que actualmente cumple una pena de prisión de siete años y medio por un robo. Celis está acusado está acusado de manejar el negocio del contrabando de droga desde la cárcel, desde donde mantenía vínculos con sectores políticos.
La causa que lleva adelante el juez Ríos comenzó en mayo del año pasado tras el hallazgo de una avioneta con 317 kilos de marihuana en un campo de Colonia Avellaneda, localidad vecina a Paraná. A partir de ese momento, comenzaron las escuchas que terminaron complicando a Hernández y Varisco.
El año pasado se filtró una escucha de Hernández y Celis, donde éste último le recrimina una supuesta falta de cumplimiento de «los compromisos» asumidos por el intendente Varisco, en el marco de la campaña política. «Yo te dije diez mil veces a vos: no voy a trabajar con Varisco porque me va a cagar, y vos qué me dijiste, qué me dijiste? decímelo en la cara… vos me dijiste: no, no te va a cagar, no te va a cagar. Y me está cagando; él mismo me manda a pegar. ¿Te pensás que soy estúpido?» dice el presunto narco.
Según la investigación, Varisco habría financiado actividades de narcotráfico, es decir, que aportaba dinero para que la organización liderada por Tavi Celis se aprovisionara de cocaína que luego vendía en distintos barrios de Paraná y Concordia.
Además, la acusación sostiene que el intendente, el concejal Hernández y la policía y funcionaria municipal Bordeira adquirieron al menos seis ladrillos de cocaína por la que pagaron entre 150.000 y 165.000 pesos por cada uno, para su comercialización.