En una visita que generó polémica y disgusto en la Argentina, el presidente de Rusia, Vladimir Putin , recibió ayer al funcionario iraní Ali Akbar Velayati, quien está acusado de ser uno de los responsables del atentado contra la AMIA , el 18 de julio de 1994, que dejó 85 muertos y 150 heridos.
La noticia del viaje del alto asesor del líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, había trascendido días atrás y causado la reacción de la Justicia local.
El juez federal Rodolfo Canicoba Corral, a cargo de la investigación por el ataque terrorista, pidió el arresto de Velayati, canciller iraní entre 1981 y 1997, a través de un exhorto judicial presentado en el área jurídica del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Argentina, para que gestione el trámite con las autoridades de Rusia, país con el que existe un tratado de extradición bilateral.
La cartera que dirige Jorge Faurie hizo lugar a la solicitud y presentó a las autoridades rusas un pedido de «detención preventiva con fines de extradición», pero hasta anoche no había tenido respuestas.
De acuerdo con el juez, «la imputación que se le formula [a Velayati] surge de su probada intervención en la reunión donde se decidiera ejecutar el atentado contra la sede de la AMIA.
Asimismo, agregó que el ministerio a su cargo tuvo «importancia medular dentro de la matriz terrorista… por la puesta a disposición de todos los recursos con los que contaba a los fines del éxito de la operación a través de la instrumentación del atentado otorgando pasaportes, visas, cobertura diplomática» a los ejecutores del ataque.
Velayati está imputado por los delitos de homicidio calificado doblemente agravado por haber sido cometido por odio racial o religioso. Además, existe una orden de detención en su contra desde 2006.
Sin embargo, el funcionario de Teherán no figura en la lista de cinco iraníes sobre los que rige una alerta roja de Interpol -que avisa a cada aeropuerto para que las fuerzas de seguridad detengan al sospechoso- por el caso, por lo que no fue aprehendido en ninguna de las otras ocasiones en las que salió de su país.
Por su parte, según trascendió ayer, el juez Canicoba Corral también le pidió a la cancillería argentina que le extendiera un pedido de extradición de Velayati a China luego de confirmarse que ese iba a ser el próximo destino de la gira del iraní.
fuente LA NACION