A la salida de un boliche, Zoe fue a buscar su auto junto a una amiga, que estaba en frente del lugar. Cuando llegan al vehículo, ven a dos travestís, golpeando el auto e intentando sacar el limpia parabrisas de atrás. Ahí fue cuando Zoe les pidió que se alejaran del auto, que ya estaba hecho el daño y que no iba a hacer nada, solo quería volver a su casa. “Ambos travestís nos encaran a mi y a mi amiga, y en ese momento me dice que a él le habían echo lo mismo la semana pasada y que no iba a parar de romperlo” cuenta la víctima.
Luego de esto, se produce “la violencia de género, ya que estos hombres vestidos de mujer la golpearon a Zoe y su amiga” aclaró la madre de la víctima. A Zoe primero le pegaron dos piñas en el lado derecho, y la última del lado izquierdo que fue la que la dejó tirada en el piso. En el momento en que cae, un amigo se acerca y discute con el agresor, ahí fue cuando aparecieron 8 travestís más. Uno de ellos le dijo “Raúl devolvelo” haciendo referencia al celular hurtado previamente. Luego, otro de los travestís agarró a su amiga y le pegó varias patadas en el rostro, las cuales le provocaron un corte de 7 puntos.
Lo que también llama la atención es que en frente había un patrullero y los policías no actuaron al ver lo que sucedió. Al momento de hacer la denuncia, la respuesta de los efectivos fue que los travestis siempre andan armados, por lo que tuvieron suerte de no tener heridas más graves, y que todos los fines de semana pasa algo similar. Esto significa que no es un caso aislado, sino que es más bien algo rutinario. Al hacer la pericia, le dijeron que no hubo delito porque no presentaban heridas graves.
Esta situación por la qué pasó Sabrina Zoé D’elia Sturlesi, deja al descubierto el desinterés por cuidar y atender hechos de estas características. Todos minimizan o miran al costado. Con las políticas de seguridad local de ambos Municipios, se tiene que hacer algo ya, es decir, no se apunta a un funcionario pero si se advierte que la Policía en este caso fue un observador privilegiado ya que había un patrullero apostado en la esquina del Boliche en cuestión y no hizo nada, ni siquiera los uniformados bajaron para preguntar cómo estaba.
Apelamos y rogamos que este nuevo sistema de “ojos en alerta” que damos fe de su positivo y eficiente funcionamiento, lo pongan a disposición con vecinos del lugar que puedan denunciar estos hechos producto de cómo los “Travestís “ tomaron la noche y la ruta. Estos, según pudieron constatar los denunciantes desde la misma policía les dijeron que portan armas de fuego y armas blancas. Que siempre queda en la nada misma.
Sabemos de la preocupación de la gestión municipal por solucionar este problema que todos los fines de semana se convierte en un nuevo hecho policial.
Estas chicas podrían ser nuestras hijas y acá todos tienen familias y también la responsabilidad de cuidar la vida y seguridad de todos los ciudadanos.
FUENTE: Diarioplus y Radio Plus (San Miguel Buenos Aires)