Carlos Rosenkrantz, presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, criticó los comentarios del candidato presidencial Alberto Fernández quien advirtió a los jueces que «deberán dar explicaciones sobre las barrabasadas que escribieron» en los casos que involucran Cristina Kirchner y sus ex funcionarios.
Rosenkrantz defendió la independencia de poderes al sostener que «el derecho puede ser usado como un arma de choque al servicio de intereses sectoriales o partidarios; para impedirlo estamos los jueces. Nuestra función es hacer que eso no suceda, generar desincentivos para que eso no suceda».
En los últimos días luego de su reciente lanzamiento como candidato a presidente Alberto Fernández dijo que hay que «revisar» algunos fallos donde está involucrada su compañera de fórmula. Incluso expresó que «si el derecho funciona Cristina no va a ser condenada».
Para Rosenkrantz «es muy importante creer y actuar sobre la base de la convicción de que el derecho es un dominio autónomo de todo lo demás y en especial de la política. Uno de los grandes problemas argentinos ha sido la judicialización de la política y la politización de la justicia, creo que hay que terminar con eso», sostuvo en declaraciones a Net Tv.
Sobre las objeciones que se le hacen por su tarea anterior como abogado de empresas, el presidente del máximo tribunal argentino dijo: «Estoy orgulloso también de haber sido solicitado por muchos clientes diversos. Quienes identifican ese hecho como reprobatorio no terminan de entender lo que hace un abogado y mucho menos lo que hace un abogado de empresas. Yo representé en algunos casos a algunas empresas muy importantes en algunos litigios importantes pero no creo que haya nada denostativo», justificó.
Luego enfatizó: «Uno tiene una particular responsabilidad de ser absolutamente imparcial y que se note esa imparcialidad cuando tiene que juzgar intereses como los que alguna vez se los ha visto asociado».
(Nicolás Stulberg)
«En mi vida he hecho muchas cosas diferentes. De hecho, trabajé durante algún tiempo en el Estado, hice política, fui funcionario del presidente Raúl Alfonsín. Fui asesor de la Convención Constituyente del ’94, de la Convención Constituyente de la Ciudad de Buenos Aires del ’96», recordó. Y agregó: «Representé intereses públicos como abogado, y de hecho, trabajé por la Argentina en algunos juicios a los que la Argentina fue sometida en la década del 2000″.
Rosenkrantz concluyó explicando que «para ser juez de la Corte, la Constitución exige ocho años de ejercicio de la profesión de abogado, lo que indica que los constituyentes pensaban que ejercer la profesión de abogado es una precondición de un buen desempeño judicial».
fuente INFOBAE