Florencia Kirchner, la hija de la vicepresidenta Cristina Kirchner publicó una serie de reflexiones sobre la lactancia materna en su perfil de Instagram. Entre ellas sonó fuerte una frase: «¿qué patriarca las convenció que dar la teta es un acto de amor?».
Los dichos de Florencia Kirchner se enmarcaron en la Semana de la lactancia que se celebró la semana pasada. La hija de Cristina quiso compartir su propia experiencia.
El posteo en Instagram de la hija de la vicepresidenta comenzó así: «25 años. Brazos fuertes por levantar a Helena (su hija). Mente podrida de escuchar críticas por no estarla amamantando. Sin embargo, nosotras estábamos bien«.
Luego continuó: «Yo tenía mi cuerpo otra vez-el embarazo me fue una guerra-y el cuerpo de ella que se movía a través del mío. Deseaba que comenzara a caminar para ser al fin dos chicas».
Florencia relató en su posteo que durante 2016, le dio una entrevista con Agustina Carman, en la que detalló que «no había dado la teta porque no quería, me generaba pánico». Allí, mencionó todo lo que se oculta de la lactancia, según detalló en su Instagram: depresión, estrés y mastitis. «Querer dar la teta pero no tener leche suficiente o, directamente, no tenerla llegando a la total caída en la frustración por no poder cumplir con el mandato y en algunos casos, el deseo. Expresé-aunque no recuerdo si con estas palabras-que la alimentación del/a recién nacido no puede estar estrictamente ligada al cuerpo de una mujer porque eso lo vuelve tiránico. La alimentación del/a recién nacido debe ser una política pública, en la que personas gestantes puedan elegir», publicó en su perfil.
Luego contó más de su experiencia y dijo que algunas luchas feministas quedaron olvidadas: «Me llovieron críticas tildándome de mala madre, snob y niña rica. Porque claro, yo pude pagar la leche. Pero estas críticas hacían caso omiso a lo ya mencionado: esto debería ser una política pública, todos deberían acceder a la leche ¿Por qué mi cuerpo solo es mío para elegir cuando hablamos de aborto? ¿Qué pasa con el cuerpo y la mente de la mujer que elige ser madre? Entre tantas luchas feministas, una quedó olvidada: la maternidad y ese después del sí quiero»
Florencia resaltó que al mismo tiempo le llovieron otros comentarios de mujeres que sufrían por médicos, amigos, familia que las presionaban dado que su lactancia no se desarrollaba bien. «O bien, mujeres que ya no la aguantaban más. No escribo contra la lactancia, ni niego beneficios. Escribo contra la sentencia. Basta de “Dale amor no plástico” “Dar la teta es lo mejor de vos” y etc, porque eso no promueve, sentencia. Nos dicen a las demás que no damos amor».
Posteriormente siguió con su argumento: «otra vez nos corren por el lado del amor. ¿Qué patriarca las convenció que dar la teta es el gran acto de amor? Promover y explicar es necesario. Apoyar que la alimentación del/a recién nacido sea una política pública y no una tiranía más sobre nuestros cuerpos, también», finalizó