En una entrevista con Marcelo Longobardi habló el economista Daniel Artana y explicó el presente que está viviendo la empresa estatal YPF por la deuda que tiene y la difícil situación que le espera para este 2021. Además, el especialista aseguró que politizar las decisiones de la compañía le pueden quitar financiamiento y le está restando valor a nuestra empresa insignia.
«Están camino a destruirla. Cuando REPSOL compró YPF la empresa valía 15 mil millones de dólares. Hoy vale 1500. De principios del año 2017 hasta hoy en parte producto de los líos económicos de la Argentina, la devaluación que impacta en una compañía endeudada en dólares, el congelamiento, la pisada de tarifas hizo que la acción perdiera 85% de valor», comenzó a explicar el economista.
«La última frutilla del postre es esta decisión que se tomó hace unos meses atrás de forzar a las compañías endeudadas en dólares a refinanciar sus pasivos, una parte importante de los vencimientos de acá a marzo si querían acceder al tipo de cambio oficial. YPF tiene un vencimiento en marzo, intentó hacer esa reestructuración pero ahora ha lanzado un canje de deuda bastante agresivo de su deuda emitida en moneda extranjera», remarcó Artana.
Asimismo, el economista habló sobre la politización de la empresa y el problema que trae esta clase de decisiones: «Lo que está descontando el valor de la acción es que estas decisiones de politizar las decisiones de la principal compañía, de obligarla a reestructurar deuda de manera agresiva le pueden quitar financiamiento», aseguró Artana que también analizó el peso de las elecciones.
«En octubre tenemos una elección de medio término. A ninguno de los argentinos a la mayoría no nos cambia el resultado electoral como vivimos a principios de octubre a como vivimos a principios de noviembre este año. Pero para el Gobierno parecería que en la elección se juega todo. El problema es que todas estas decisiones cortoplacistas terminan impactando. Si el gobierno le está restando un enorme valor a su principal compañía, le está restando posibilidades de invertir. Un gobierno populista mira nada más que el cortísimo plazo y no le importan las consecuencias que va a tener que sufrir», sentenció.
«Lo curioso de todo esto es que el kirchnerismo ya vivió esto. Estamos lejos de la destrucción de PDVSA, estamos comenzando por ese camino. Argentina en algún momento empieza a tener faltantes de energía que lo tenés que importar, empieza a subir el costo fiscal porque tenés un límite a lo que le podés pedir a las empresas que pongan de su bolsillo. Todo esto tiene patas cortas», cerró el economista.
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Fuente: elintransigente