Aunque desde que aterrizó la Sputnik V en el país se fueron conociendo pequeñas historias en ciudades del interior sobre robos, desapariciones, distribución política y aplicaciones irregulares de funcionarios, el “vacunagate” de Ginés terminó por enterrar la credibilidad del plan de vacunación del Gobierno. Una difícil situación que deberá revertir la ministra Carla Vizzotti de forma urgente. Aunque, hasta el momento, la estrategia parece ser la de tapar el sol con las manos.
Aunque el vacunatorio VIP pasa a ser una abstracción sin límites geográficos ni jurisdiccionales, el Gobierno quiso encapsularlo en un solo espacio: el Hospital Posadas. En esa lógica, el primer paso fue difundir la lista de las personas que fueron inmunizadas por el personal de ese centro de salud para dar por terminado el misterio sobre “el incidente Verbitsky”. El segundo paso, fueron las palabras.
“Terminemos con esta payasada”, dijo Alberto Fernández desde México al cuestionar a la Justicia, a los medios y a la oposición. En la misma línea, se inscribió Santiago Cafiero: “El vacunatorio VIP es un invento de los periodistas”. La flamante ministra no se quedó atrás: “No hay vacunatorio VIP ni en el Ministerio ni el ámbito nacional”. La misma línea sigue el gobernador Axel Kicillof.
Pese a los intentos por sepultar el problema, siguen apareciendo en todo el país nuevos casos de vacunados fuera de protocolo, categorizados como personal de salud o adelantando etapas del propio plan del Gobierno. Sindicalistas, legisladores, ministros aparecen bajo sospecha en las más variadas situaciones. Muchos burlaron el sistema bajo la etiqueta de “personal de salud” y otros como “personal estratégico”. Uno de ellos fue el ministro Jorge Ferraresi, titular de la cartera de Desarrollo Territorial.
La situación en cada provincia
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, decidió tomar el toro por las astas y reconocer la existencia de listas de vacunados VIP en la provincia, enviadas desde clínicas privadas, y adelantó que emitirá un decreto para disponer la publicación periódica de todos los inmunizados contra el coronavirus.
“Han habido algunas clínicas privadas que faltó que pongan hasta el perro y el gato para que se vacunen y han pasado las listas”, dijo Morales, quien afirmó que promoverá multas de hasta 1 millón de pesos para aquellos casos en los que no se haya respetado el orden de prioridad dispuesto.
Aunque la ley 25.326 de Protección de Datos Personales impide difundir información personal, esos datos “pueden ser recolectados y objeto de tratamiento cuando medien razones de interés general autorizadas por ley”.
En ese sentido, Morales consideró que en este caso “está muy claro el interés general” y por eso, planteó, está impulsando un decreto a convertir en ley en la provincia.
Gerardo Morales, gobernador de Jujuy
Han habido algunas clínicas privadas que faltó que pongan hasta el perro y el gato para que se vacunen y han pasado las listas.
Vacunatorios VIPLas provincias en rojo son las que tienen denuncias por vacunaciones por fuera del protocolo. En Monserrat, CABA, se montó el «vacunatorio VIP» de Ginés González García.
“Muchos trabajadores inclusive han sido amenazados en el hospital de campaña (principal centro vacunatorio de Jujuy) por aquellos que se creen con poder económico y van a ser denunciados”, aseguró.
En Santa Fe, el Ministerio de Salud de la provincia admitió que se vacunaron a decenas de encuestadores del Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec). El Litoral reveló que el intendente de la ciudad de Funes, Rolvider Antonio Santacroce del Frente de Todos, de 53 años, admitió que se vacunó contra el COVID-19. “No me vacuné como intendente. Es como dueño de empresa que tiene que ver con la salud. Esas empresas están a nombre mío, las tengo desde hace 26 años”, se defendió. Un argumentó similar al que utilizó el sindicalista Hugo Moyano.
Dos semanas atrás, Salta tuvo su escándalo propio con la vacunación de periodistas, de dirigentes sociales y de una diputada provincial en la ciudad de Tartagal. Ante las pruebas, el gobernador Gustavo Sáenz afirmó que “si hay gente que se vacunó y no le correspondía deberá asumir las responsabilidades” y pidió a la población que denuncie las irregularidades.
En Santa Cruz , un intendente de Santa Cruz, su esposa y su chofer se aplicaron la Sputnik V.
En Chubut, el secretario general del Sindicato de Camioneros y ex diputado nacional, Jorge Taboada, reconoció que 15 trabajadores de la obra social y cinco dirigentes se aplicaron la vacuna Sputnik V en Comodoro Rivadavia. La Justicia ordenó allanamientos la semana pasada en la sede gremial y la obra social en la causa que investiga el faltante de 30 dosis de vacunas del COVID-19.
En La Rioja, el bloque de diputados de Juntos por el Cambio denunció que al menos seis miembros del gabinete del gobernador Ricardo Quintela se vacunaron contra el COVID-19 bajo la categoría de “personal de salud”.
Los legisladores opositores indicaron que, en total y de acuerdo a lo planteado por los propios trabajadores de la salud que intervienen en el operativo, se habría vacunado de manera irregular a unas 1000 personas, según el diario El Ancasti.
Las vacunas VIP en la provincia de Buenos Aires: legisladores, jueces e hijos
En tanto, algunos dirigentes de la oposición en la Provincia de Buenos Aires arden al ver las fotos de jóvenes k vacunados en redes, sobre todo en La Plata, donde impulsan denuncias contra el oficialismo e impulsaron una comisión investigadora. “La vacunación militante” habría alcanzado a unos cien consejeros escolares.
En La Matanza, la hija de la Secretaria de Salud, Gabriela Álvarez, que no pasa los 40 años, muestra con orgullo su certificado con la Sputnik V. TN.com.ar se comunicó con la médica y argumentó que Ximena Barace, su hija, se aplicó la vacuna como “personal de salud”, que se inscribió y esperó su turno, aunque, según su cv en LinkedIn es administrativa del municipio a cargo de Fernando Espinoza.
Ya es conocido el caso de Eduardo Duhalde, en la lista que difundió el Gobierno, que se inmunizó junto a sus hijos.
Legisladores bonaerenses también se vacunaron. Pero la trampa no es exclusiva de los políticos: los integrantes de la Corte Bonaerense Luis Esteban Genoud e Hilda Kogan, también se aplicaron la vacuna en el Hospital El Cruce de Florencio Varela. Lo hicieron “saltando la cola” como “personal de salud”.
Mientras, desde el gobierno bonaerense se muestran optimistas con el ritmo de la vacunación y la participación ciudadana. Unas 3 millones de personas se inscribieron para vacunarse y desde la gestión de Daniel Gollán ven con buenos ojos este número. “Necesitamos vacunar a los 5.7 millones personas de riesgo”. Cuentan con 600 vacunatorios.
En ese momento, se está finalizando la etapa de vacunación de trabajadores de la salud, entre los cuales se colaron algunos privilegiados, y ya se comenzó con la aplicación a mayores de 70 y docentes. “Vacunamos casi al 80 por ciento del personal de salud”, indicaron desde la gobernación.
El próximo paso será a mayores de 60 años, después se seguirá con la franja etaria de 18 a 59 años, con enfermedades de