El ministro de Economía opinó sobre la brecha cambiaria
Martín Guzmán, opinó sobre las declaraciones del precandidato a legislador por la ciudad de Buenos Aires , Roberto García Moritán, quien dijo -hace algunas semanas- que el dólar blue podía alcanzar los $400 tras las elecciones legislativas de este año.
Guzmán buscó quitarle credibilidad y lo calificó de ser “poco serio”. “No hay ni que detenerse en cosas que carecen de seriedad, hay intereses en juego y cada quien decide para qué hace las cosas que hace. Nosotros estamos para cuidar la economía argentina, cuidar al pueblo argentino, y resolver los problemas y la economía de la gente; eso es lo que hacemos bajo el liderazgo de Alberto Fernández”, dijo en declaraciones a C5N. Y aseguró: “La ley de Presupuesto proyectaba un tipo de cambio oficial de 102,40 pesos. Al mismo tiempo, hemos ido acumulando reservas y vamos a continuar con la misma política cambiaria. No va a haber disrupciones cambiarias después de las elecciones”.
Días atrás, el economista y empresario gastronómico Roberto García Moritán había manifestado su pesimismo sobre el escenario que se vendrá tras las elecciones: “El ajuste fuerte se viene… No tengo ganas de ponerme en fatalista, pero un dólar a 400 mangos puede llegar sin ningún problema. Al doble de lo que está hoy, de mínima”. Sin embargo, al poco tiempo, reconoció: “Exageré un poco”.
Guzmán, por su parte, explicó: “En nuestro programa apuntamos a un horizonte en el cual las regulaciones y controles de cambios sean diferentes: un esquema de regulaciones macroprudenciales que desaliente la inversión especulativa de corto plazo, pero aliente la inversión en la economía real. Para llegar a ese esquema, hace falta tiempo para que el Banco Central pueda acumular reservas en mayores niveles, y eso no sucede de un día para el otro”.
Guzmán se refirió a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y sostuvo que el Gobierno intenta “resolver el daño que la gestión previa le hizo a la Argentina”. Según dijo, el país “no tiene capacidad de pago” por lo que consideró que necesita “más tiempo para negociar”. En esta línea, el oficialista añadió: “Todas las posibilidades están abiertas. Lo importante es que sea bueno; si es bueno y rápido, mejor. Queremos corregir parte de las condiciones que dañan a los países de ingresos medios, como el hecho de que se pagan unas sobretasas de interés”.