La central sindical quiere recuperar la calle copada por los movimientos sociales y la oposición.
La CGT buscará este año desmarcarse del Gobierno sin romper con el Frente de Todos, convocando el Día de la Lealtad Peronista a una masiva movilización “a favor de la cultura del trabajo y la producción”.
buscará este año desmarcarse del Gobierno sin romper con el Frente de Todos, convocando el Día de la Lealtad Peronista a una masiva movilización “a favor de la cultura del trabajo y la producción”.
Gerardo Martínez, líder de la UOCRA, se encargó de subrayar que la del 17 de octubre será una marcha “a favor de la cultura del trabajo y la producción” porque “sin empresas no hay trabajo y sin trabajo no hay empresas”. Si bien remarcó que en la central obrera son “soberanos”, tomó distancia de la idea de una movilización en contra del Gobierno.
En un contexto en el que busca marcar nuevas relaciones de fuerza con el oficialismo, el Consejo Directivo de la CGT volverá a reunirse el próximo martes para aprobar el orden del día de la convocatoria al Congreso para la elección de la nueva cúpula, previsto para el 11 de noviembre, apenas tres días antes de las elecciones legislativas.
Además, acordó convocar para el 22 de septiembre al Comité Central Confederal para que apruebe el llamado al congreso del 11 de noviembre, dando cumplimiento al estatuto de CGT. El mandato de las autoridades actuales está vencido desde agosto, pero el Ministerio de Trabajo extendió su vigencia debido a la imposibilidad de realizar reuniones en momentos de aislamiento estricto por la pandemia de coronavirus.
En el encuentro del próximo martes está previsto que terminen de acordar la marcha de la CGT en el marco del Día de la Lealtad, aunque por tratarse de un domingo lo más probable es que finalmente se convoque para el lunes 18 de octubre.
Según confirmaron referentes de la central obrera, por estas horas está casi definido que la nueva cúpula estará conformada por un triunvirato y el nombre con mayores posibilidades de integrarlo es del de Daer. Para los otros dos aún hay incógnitas y mucho peso tendrá el resultado de las PASO para determinar hasta dónde el Gobierno podrá incidir en la disputa del poder.