Dicen que la vacuna es experimental y que los hisopados son invasivos. Irían a la Corte por obligatoriedad la de Córdoba para judiciales.
Luchan por su libertad los empleados judiciales de Córdoba
En Córdoba, 60 empleados del Poder Judicial se niegan a vacunarse y volver al trabajo presencial. Tampoco aceptan hisoparse cada 72 horas y advierten que están dispuestos a escalar el reclamo en la Corte Suprema si sus demandas no son aceptadas.
Los trabajadores rechazan un acuerdo reglamentario del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de esa provincia, que estableció que a partir de este miércoles deben regresar a sus puestos de trabajo quienes hayan recibido el esquema completo de vacunación, o aquellos que tengan una dosis y no tengan comorbilidades.
La norma obliga a los empleados que no quieran vacunarse a presentar un PCR negativo cada 72 horas. Caso contrario, serán licenciados sin goce de sueldo.
Los judiciales impugnan
El acuerdo 1712 del TSJ impugnado por el grupo de empleados resolvió que solo quedan exentos de retomar las tareas presenciales -es decir, podrán continuar sus labores bajo la modalidad del teletrabajo- los empleados que recibieron la primera dosis y puedan acreditar factores de riesgo, y aquellos que sean pacientes oncológicos, trasplantados e inmunodeprimidos.
El conflicto, que por ahora se reduce a la Justicia cordobesa, podría sentar un precedente en cuanto a la situación en general de los grupos denominados antivacunas, un pequeño porcentaje de la población cuya exposición aumenta en la medida que avanza el plan de vacunación.
Contra los hisopados
“Te meten un pedazo de madera por la nariz. Y la efectividad de los PCR también está puesta en duda. Y mientras todo esté puesto en duda, primero debe primar la Constitución Nacional, fundamentalmente los artículos 14 y 16 (el 14 y el 14 bis refiere a los derechos y leyes laborales, mientras que el 16 señala que “todos los habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad”). No es que no quieran trabajar: hacen teletrabajo desde que comenzó la pandemia”.
El Poder Judicial tiene una planta de más de 8000 trabajadores. Según señalan desde el sector, unos 500 todavía no están vacunados, y 100 de ellos no lo hicieron por voluntad propia. “Yo misma elegí no vacunarme. Es una vacuna experimental. Hasta que no sepa de qué está hecha, yo no me la pongo. Tengo una postura moral ante este tema”, concluyó Pérez Casaretto.
TN