Una decisión tomada por las autoridades de ambas Cámaras del Congreso obliga a los legisladores a pedir por carta el aumento en sus dietas, si es que quieren que se les acredite.
La presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, decidieron que el aumento de dietas del 69% no sea automático para los legisladores, sino que deben pedirlo expresamente por carta.
La decisión pone en aprietos a los opositores que salieron a criticar el incremento, pero que lo hubieran recibido igual si se seguían los pasos habituales.
Ahora, deberán pedirlo individualmente a los titulares de cada Cámara y, de tal modo, Massa y Fernández de Kirchner, se desligarán de la responsabilidad y podrán demostrar que se lo pidió tal o cual diputado o senador, según corresponda.
Los empleados del Congreso tendrán un incremento del 69% de sus sueldos y dietas, luego de cerrar la paritaria con los gremios que nuclean a los trabajadores. Además, firmaron una cláusula de revisión para noviembre.
El acuerdo se abonará en dos cuotas (una con el pago del sueldo de julio y la otra con los sueldos de octubre), y serán de 30% de aumento cada una, pero significa un 69% de incremento acumulado.
Las dietas de diputados y senadores están atadas a los incrementos paritarios de los empleados legislativos, por lo cual también se verán beneficiados si así lo piden por carta.