Jorge Macri pasó el examen en la justicia de CABA por las impugnaciones a su domicilio. En una próxima instancia requiere fallo de la Corte
Planteos contra Jorge Macri, rechazados
El tribunal electoral de la Ciudad rechazó las impugnaciones contra Jorge Macri y consideró que el candidato del PRO «cumple con los requisitos estipulados en el artículo 97 de la Constitución local para postularse al cargo de Jefe de Gobierno».
Como anticipó LPO, la postulación de Jorge Macri pasó el primer examen en la justicia porteña. En una próxima instancia, el ex intendente de Vicente López necesitará un fallo favorable del TSJ para seguir en carrera en a interna frente a Martín Lousteau.
Roberto Carlos Requejo, el flamante juez electoral porteño, fue quien avaló la viabilidad de la candidatura del primo del ex presidente ante las impugnaciones de Nito Artaza y Vanina Biasi, del FIT. Requejo fue votado por todo el oficialismo, incluida la Coalición Cívica y es cercano a Daniel Angelici.
Juces nombrados por MM influyeron favorables a Jorge Macri
Como explicó LPO, la Constitución de la Ciudad estipula entre los requisitos para ser jefe de Gobierno «ser nativo de la Ciudad o poseer una residencia habitual y permanente en ella no inferior a los cinco años anteriores a la fecha de elección». El principal argumento de Macri es que posee mucho más de cinco años de residencia permanente, aunque esos 5 años no son inmediatamente anteriores a la fecha de la elección.
Requejo validó esas explicaciones y consideró que no puede pasarse por alto la diferencia que hace la Constitución de la Ciudad entre los requisitos para los legisladores (cuatro años de residencia inmediata anterior a las elecciones) y los que estipula para ser jefe de Gobierno (5 años de residencia habitual y permanente).
«La pretensión (…) de exigir a los candidatos/as a Jefe/a de Gobierno que acrediten una residencia de cinco (5) años ‘inmediata’ a la elección, implica una lectura que se aparta de la clara letra de la Constitución local que, en su artículo 97, exige específicamente la demostración de una residencia en la Ciudad caracterizada como ‘habitual y ‘permanente'», puede leerse en el fallo.
«Sostener una interpretación contraria conllevaría asimilar los términos inmediatez, habitualidad y permanencia a los que aluden las normas citadas, lo cual resultaría inadmisible a la luz del tradicional criterio interpretativo que enseña que no cabe presumir la imprevisión o inconsecuencia del constituyente», explica Requejo.
El juez también rechazó aplicar el fallo que impugnaba la candidatura de Adrián Pérez en 2013 por no poder acreditar los años de residencia necesaria. «Dicho precedente no surge una regla jurídica mayoritaria que pueda aplicarse al presente caso, a la luz del sentido de los diversos votos emitidos en aquella oportunidad y las diferencias que median entre las plataformas fácticas de aquél y este caso», analizó Requejo.
Se descuenta que habrá una apelación al fallo y por eso será el Tribunal Superior el que defina si Jorge puede ser candidato. En el TSJ Mauricio Macri y Daniel Angelici tienen peso político.
De los cinco jueces, tres fueron nombrados durante los gobiernos de Macri y Horacio Rodríguez Larreta.
Tanto Alicia Ruiz como Francisco Lozano, fueron parte de la primera camada de magistrados en asumir en el Tribunal Superior. Ruiz suele fallar en minoría, mientras que Lozano alterna entre la mayoría y la minoría.
Inés Weinberg de Roca, otra de las integrantes, llegó al tribunal en 2013 y tiene cercanía con Mauricio Macri, quien incluso la propuso como procuradora de la Nación cuando fue presidente. La titular de TSJ posee de todas formas una larga carrera en tribunales nacionales e internacionales.
Los «nuevos» integrantes del Tribunal Superior son Marcela De Langhe y Santiago Otamendi, nombrados en 2019. Ambos hicieron carrera en la justicia porteña, pero antes de asumir en el TSJ Otamendi fue viceministro de Germán Garavano.
De Langhe se desempeñó como rectora del Instituto de Seguridad, dependiente del Ministerio de Seguridad porteño en ese entonces a cargo de Martín Ocampo, de la línea radical que lidera Angelici.
LPO