Alerta entre los gobernadores por la situación económica de sus provincias
Cada vez más preocupados por la situación financiera en sus provincias, los 10 gobernadores de Juntos por el Cambio -la mayoría de los cuales todavía no asumió el poder y desconoce el estado real de las cuentas que encontrará cuando lo hagan en diciembre- actúan en bloque y se muestran cada vez más activos: los mandatarios volverán a reunirse para dar una muestra de fuerza, tanto hacia el interior de la coalición opositora, cuyo destino sigue siendo incierto sobre todo en el Congreso, como para el gobierno en formación de Javier Milei, que prometió ser riguroso en el ajuste.
El encuentro será al mediodía, en el Club Alemán de Equitación del barrio porteño de Palermo. El jefe de gobierno porteño, Jorge Macri (PRO), actuaría de anfitrión y se espera a Rogelio Frigerio (Entre Ríos) e Ignacio “Nacho” Torres (Chubut), también del PRO; los radicales Alfredo Cornejo (Mendoza), Gustavo Valdés (Corrientes), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Leandro Zdero (Chaco) y Carlos Sadir (Jujuy) y de fuerzas provinciales como Marcelo Orrego (San Juan). Claudio Poggi (San Luis) no será de la partida, pero es ausente con aviso: se quedará en su provincia en la última sesión legislativa del año.
Será la tercera cumbre de gobernadores desde la derrota electoral del 22 de octubre, en la que Patricia Bullrich quedó fuera de la carrera para el balotaje. Pero, a diferencia de los dos encuentros anteriores, los mandatarios esta vez cursaron invitaciones a los senadores y diputados nacionales de JxC, tanto los que hoy están en funciones como aquellos que ingresarán a las cámaras parlamentarias la semana que viene.
“Va a importar la foto más que nada. Es para reunir la tropa, mostrarle a Mikei ´mirá toda la gente que tenemos que puede levantar o no la mano para tus proyectos, así discutamos lo que nos corresponde’. El tema es que vayan todos los que tienen que ir, porque si van 20 no es una buena señal”, dijeron a TN cerca de uno de los gobernadores radicales, que descontaba una amplia convocatoria.
Los gobernadores opositores se mantuvieron neutrales ante el balotaje entre Milei y Sergio Massa. Son, más que nada por necesidad, los más preocupados en mantener la unidad o al menos el mayor grado de integridad de lo que fue hasta ahora JxC en el Congreso. Si efectivamente es así, como ellos mismos aseguran, sorprende que ninguno se haya comunicado con la Coalición Cívica que no participará de la cumbre y que, por otra parte, es cierto que tras el balotaje anunció que retomaría su autonomía partidaria.
En la nueva liga de gobernadores opositores hacen cuentas y creen que, de base, podrían retener por sí mismos una quincena de senadores y unos 30 o 40 diputados que les responden directamente a ellos. A eso, se podrían sumar sectores moderados el PRO que evitarían cualquier cercanía con el gobierno libertario y el grueso de la UCR, en un espacio más amplio en el que trabajan, entre otros, diputados siempre “dialoguistas” como Emilio Monzó y Nicolás Massot, que, por otra parte, apuntan a expandirse hacia sectores que responden a otros mandatarios que no forman parte de JxC.
Y todavía falta conocer como se ordenaría el sector más duro del PRO, que hasta este lunes peleaba para que el hasta hoy jefe de la bancada amarilla en Diputados, Cristian Ritondo, presida la Cámara Baja durante el gobierno de Milei, algo que podría terminar determinando si habrá un espacio integrado con los libertarios o no.
En ese sentido y bajó esa lupa podrían leerse las recientes declaraciones públicas del radical Pullaro: “No tenemos que cogobernar, tenemos que ser una fuerza que acompañe institucionalmente al gobierno, no creo que esté bien presidir la Cámara de Diputados, lo tiene que poner La Libertad Avanza”, dijo el mandatario santafecino a LN+ el lunes por la noche, mientras en ese mismo momento el espacio libertario discutía internamente qué hacer.
En el PRO confirmaron, sin embargo, que Ritondo estaría este martes en el encuentro con gobernadores y opinaron que su cercanía con una decena de mandatarios provinciales y un centenar de legisladores serviría como representación gráfica de un sustento político que apuntalaría sus chances para presidir la Cámara, puesto clave en el que el próximo gobierno necesitará alguien con capacidad para negociar sus proyectos de ley.
En cualquier caso, la debilidad parlamentaria con la que Milei llegará a la Presidencia ofrece a los gobernadores la chance de hacer valer su peso legislativo y el incentivo a un sector de JxC para mantener algo de “unidad”.
El escenario parlamentario sigue estando bastante abierto a una semana del balotaje que definió al próximo presidente y más de un mes después de la elección nacional que determinó quienes ingresarían al Senado y Diputados. Pero no queda mucho tiempo más, y entre esta semana y principios de la semana que viene forzosamente deberán existir definiciones.
Los mandatarios provinciales vienen advirtiendo cada vez con más insistencia las dificultades financieras con las que comenzarán sus propios mandatos, lo que dificultaría hasta el pago de sueldos y aguinaldos. En ese sentido, presionan con fuerza para el Gobierno nacional compense a las provincias por la virtual eliminación del pago del impuesto a las Ganancias -gravamen coparticipable- que el oficialismo impulsó antes del balotaje y la mayor parte de los diputados del PJ acompañó como parte de la agenda de campaña de Massa.
El tema sobrevolará inevitablemente la cumbre de gobernadores y legisladores opositores de este martes y forma parte de las conversaciones entre los gobernadores y quien será el próximo ministro del Interior, Guillermo Francos, encargado del diálogo con las provincias. Hasta ahora, los gobiernos radicales de Corrientes y Mendoza ya presentaron reclamos ante la Corte Suprema por la quita de fondos que supuso la eliminación de Ganancias. Sin compensación, lo seguirían desde diciembre otros mandatarios de JxC con el mismo planteo ante el máximo tribunal.