Los militares están furiosos con Milei debido a que ha eliminado la jerarquización salarial en las fuerzas militares.
Esta medida, que había sido instrumentada por Taiana para equiparar los sueldos militares con los de las fuerzas de seguridad, ha sido dejada sin efecto. Los uniformados destacan a la vice Villarruel, pero lamentan que «no tiene lapicera ni billetera».
Esta decisión ha generado un malestar generalizado en el ámbito castrense, ya que esperaban que se cumpliera la promesa de equiparación salarial que había sido hecha por dirigentes de La Libertad Avanza antes y después de las elecciones. El gobierno anterior había pagado cuotas de jerarquización en 2023, pero la decisión de prorrogar el presupuesto del año pasado ha dejado sin fondos para cumplir con esas obligaciones financieras.
A pesar de las explicaciones oficiales de que se priorizará retomar el camino de mejora de los sueldos una vez que se estabilice la economía, los militares se sienten decepcionados y consideran que la eliminación de la jerarquización salarial es una irresponsabilidad por parte del gobierno.
En cuanto al voto militar, tanto Milei como Massa han buscado acaparar el apoyo de las Fuerzas Armadas. Se estima que el voto de las Fuerzas Armadas, sumado a sus familias, representa casi un millón de votos. Massa ha tendido puentes hacia las Fuerzas Armadas, promoviendo la jerarquización salarial de los militares. Por otro lado, Milei ha contado con el apoyo de la candidata a vice, Victoria Villarruel, quien proviene de una familia de militares y defiende fuertemente a las Fuerzas Armadas.