Se produjo, este jueves, un escándalo en la asamblea del PRO, el partido político argentino, que resultó en una fractura irreversible entre los seguidores de Patricia Bullrich y el expresidente Mauricio Macri.
Desconocimiento de acuerdos previos: En la asamblea del PRO, la mayoría que responde a Macri decidió desconocer acuerdos previos y marginar a Patricia Bullrich de la conducción de ese cuerpo deliberativo. Esta decisión generó gritos, quejas y el retiro de los dirigentes que apoyan a Bullrich.
Tensión entre Macri y Bullrich: La relación entre Macri y Bullrich ha entrado en un terreno de aspereza indisimulable. La aprobación de la Ley Bases marcó un punto de inflexión en el vínculo que los dos dirigentes habían cultivado. Aun dentro de un mismo horizonte ideológico, esta semana puso sobre la mesa las diferencias que distancian al expresidente del Gobierno libertario.
Apoyo a Javier Milei: En la asamblea, se tomó una decisión clave que está incluida entre los puntos de la orden del día: «Somos el cambio. El PRO no se fusionará con otros partidos. Apoyamos al gobierno de Javier Milei y todas las iniciativas que acompañen el cambio que la Argentina votó».
Esta postura refleja el rechazo a la disolución del partido en La Libertad Avanza, el partido liderado por Milei.
Postura de Patricia Bullrich: Antes de que se concrete esta fractura, Patricia Bullrich difundió una carta donde explicó su posición. En ella, afirmó que el debate que quiere dar en el PRO no es un debate de cargos, sino un debate de rumbo. Además, expresó su apoyo a Javier Milei y destacó la importancia de aprovechar la oportunidad de ser protagonistas del cambio más atrevido y necesario de las últimas décadas.
Ruptura y clima de tensión: En la reunión de la asamblea, los cruces entre los seguidores de Bullrich y los seguidores de Macri se agravaron cuando se confirmó que la mayoría absoluta que responde a Macri iba a postular a Martín Yeza como presidente de la Asamblea, desconociendo la propuesta de Bullrich para ese cargo. Esto generó gritos, discusiones y un portazo por parte de los seguidores de Bullrich.
Pocas palabras, el escándalo en la asamblea del PRO, revela una fractura irreversible entre los seguidores de Patricia Bullrich y Mauricio Macri. La tensión entre ambos dirigentes, la postura de apoyo a Javier Milei y el rechazo a una fusión con La Libertad Avanza han sido los principales desencadenantes de esta situación.