El 6 de agosto de 2024 ocurrió en Rivadavia, San Juan, un lamentable hecho de desobediencia a orden judicial y agresión menor agravada en contexto doméstico:
Diego Montenegro, expareja de la víctima, desobedeció una orden judicial y se acercó a la víctima y a su hijo menor de edad.
Intentó tomar al niño y agarró con fuerza a la víctima por el cuello.
La vecina de la víctima, Adriana, intervino y se llevó al niño.
La víctima llamó a la policía y Diego fue posteriormente arrestado.
El procedimiento judicial fue el siguiente:
El caso estuvo a cargo del doctor Carlos Rodríguez, fiscal local.
Diego recibió una sentencia suspendida por desobediencia a una orden judicial y fue anulada por los cargos de agresión agravada menor debido a la falta de pruebas.
Fue sentenciado a 30 horas de servicio comunitario en un plazo de 5 meses y se le prohibió tener conducta perturbadora.