En el año, el Gobierno lleva recortados $22,5 billones del gasto y el 27% lo aportan los jubilados.
Bajo el gobierno de Javier Milei, los jubilados y pensionados están soportando el mayor peso del ajuste, a pesar de las afirmaciones del gobierno de que los haberes previsionales ya no están perdiendo poder adquisitivo frente a la inflación. De acuerdo con el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el 27% de un recorte récord de 22,5 billones de pesos en los primeros siete meses del año a valores constantes recae sobre el sistema previsional.
El informe de IARAF señala que, de un total de 16 tipos de gastos, 14 han experimentado recortes por un total de 22,9 billones de pesos en moneda constante. Los dos gastos que aumentaron representan solo 0,4 billones de pesos, lo que resulta en una disminución general del gasto primario de 22,5 billones de pesos.
De los gastos que se redujeron, las jubilaciones y pensiones representaron el 27% del ajuste total, lo que significa que soportaron el mayor peso relativo del recorte en comparación con otros gastos importantes como la inversión real directa, las transferencias a provincias, los subsidios a la energía y los salarios.
La Universidad Católica Argentina (UCA) informa que el valor del haber mínimo jubilatorio alcanzó su punto más crítico en febrero de 2024, cuando la jubilación mínima cayó a 144.993 pesos sin el bono y a 220.430 pesos con el bono adicional. Estos valores representan una caída del 66% y 48%, respectivamente, en comparación con el haber promedio de 2013.
Sin embargo, el haber mínimo ha experimentado una relativa recuperación desde entonces, alcanzando los 215.581 pesos sin bono y los 285.581 pesos con bono en julio. Durante el mismo período, la inflación acumulada de los primeros siete meses fue del 79,8%, mientras que la inflación interanual de julio fue del 271%.
El valor de las jubilaciones mínimas en el mejor momento entre 2001 y 2024 fue en el primer semestre de 2013, cuando la mínima sin bono debería haber sido de 494.490 pesos a valores actuales.
El cambio de la fórmula de ajuste de las jubilaciones y pensiones ha provocado un efecto licuadora en los haberes de septiembre, que aumentarán un 4% en línea con el incremento de la inflación de julio informado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Sin embargo, el gobierno mantiene el bono adicional de 70.000 pesos, lo que significa que el jubilado con la mínima cobrará 304.540 pesos en total, lo que representa un aumento en efectivo de alrededor del 3%.
En resumen, los jubilados y pensionados están soportando el mayor peso del ajuste bajo el gobierno de Javier Milei, a pesar de las afirmaciones del gobierno en sentido contrario. El sistema previsional ha sufrido un recorte récord del 27%, y las jubilaciones mínimas siguen perdiendo poder adquisitivo en comparación con los salarios y la inflación. A pesar de algunas mejoras en los últimos meses, el valor de las jubilaciones mínimas sigue siendo significativamente más bajo que en el pasado, y el efecto licuadora del bono adicional no es suficiente para compensar la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados y pensionados.