La Unión Cívica Radical (UCR) ha tomado medidas disciplinarias contra cuatro de sus diputados nacionales: Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat y Pablo Cervi. Estos legisladores han sido suspendidos del partido y removidos del bloque radical en la Cámara de Diputados.
La decisión fue tomada por la mesa directiva de la Convención Nacional de la UCR, liderada por Gastón Manes y Hernán Rossi. El motivo de la suspensión es el apoyo que estos diputados brindaron al veto del presidente Javier Milei sobre la ley de movilidad jubilatoria, votando en contra de la posición oficial del partido.
Esta suspensión implica que los cuatro diputados perderán temporalmente sus derechos partidarios mientras el Tribunal de Ética del partido lleva a cabo una investigación sobre sus acciones. Es importante destacar que un quinto diputado, José Tournier, también votó junto a Milei, pero al no estar afiliado oficialmente a la UCR, no puede ser sancionado por el partido.
Además, la situación de otros dos legisladores radicales, Roxana Reyes y Gerardo Cipolini, también está siendo evaluada. Aunque estos no votaron en contra de la ley, se ausentaron durante el debate, lo que ha llamado la atención de las autoridades partidarias.
La decisión de elevar estos casos al Tribunal de Ética se tomó con una votación de 11 a 1 en la mesa directiva. La suspensión preventiva de los cuatro diputados mencionados se aprobó con 10 votos a favor y 2 en contra.
Esta medida refleja las tensiones internas en la UCR y en la oposición en general, frente a las políticas del gobierno de Milei. El partido busca mantener una línea coherente en su oposición, mientras algunos de sus miembros parecen más dispuestos a colaborar con el oficialismo en ciertos temas.