El teniente general Ígor Kirílov, jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia, falleció en Moscú a causa de la explosión de un artefacto explosivo. Su asistente también murió en el incidente.
Según la información oficial, el hecho ocurrió en la madrugada del 17 de diciembre en la avenida Riazanski de la capital rusa. Un explosivo colocado en un scooter eléctrico junto a la entrada de un edificio detonó, causando la muerte de Kirílov y su colaborador.
El Comité de Investigación ruso abrió una causa penal por el asesinato de los dos militares. Las autoridades señalaron que los expertos forenses y criminalistas se encuentran trabajando en el lugar para determinar todas las circunstancias del ataque.
Kirílov era conocido por ofrecer regularmente información sobre la actividad de Estados Unidos en laboratorios biológicos, especialmente en Ucrania. Había advertido sobre el riesgo de que Kiev utilizara armas químicas durante el conflicto con Rusia.