Desde hoy, ha entrado en funcionamiento la receta electrónica, un sistema digital que busca ser la única forma de prescribir medicamentos. Aunque la receta de papel seguirá siendo válida durante el año en casos especiales, esta nueva herramienta facilitará el proceso, evitando confusiones por la escritura del médico y agilizando la entrega en las farmacias.
Este cambio fue formalizado en un decreto del Ministerio de Salud y tiene como objetivo hacer más transparente el control entre la prescripción y la entrega de medicamentos. Las recetas electrónicas deben incluir detalles como la identificación del médico, el diagnóstico, la fecha de emisión y la firma digital, así como la información del paciente y del medicamento.
Para los pacientes, solo será necesario llevar su DNI o credencial a la farmacia. El sistema contará con verificaciones para asegurarse de que los profesionales de salud estén registrados, y las recetas se almacenarán en repositorios virtuales a los que las farmacias podrán acceder fácilmente.
En Argentina, varias jurisdicciones ya cuentan con leyes de receta electrónica, y aunque algunas todavía están trabajando en su implementación, el avance hacia un sistema más moderno es inminente. La receta de papel permanecerá como una opción temporal en áreas de difícil acceso o durante interrupciones del sistema.