Pese a que el Indec informó una inflación del 2,7% en diciembre en la región noroeste, que incluye a Salta, los consumidores de la capital provincial aseguran que los precios siguen aumentando en la mayoría de los productos.
Los testimonios recogidos por El Tribuno dan cuenta de una situación muy distinta a los datos oficiales. Los clientes de supermercados relatan que los incrementos persisten, con subas de alrededor de 100 pesos mensuales en productos básicos como aceite, azúcar, harina, leche, arroz y yerba.
Lucrecia, una peluquera de 58 años, afirma que «no vemos reflejado en las góndolas lo que dice el Indec». Menciona que artículos como el café y la carne siguen encareciendo, con el kilo de carne llegando a 11.000 pesos. Dice que debe hacer «economías» en su hogar para llegar a fin de mes.
Por su parte, Ana, una docente jubilada de 66 años, señala que «las cosas siguen aumentando» y que hay «bastante especulación», con negocios cobrando el doble o más por el mismo producto. Explica que compra menos cantidad y reemplaza la carne por pollo.
Otro testimonio es el de Gladys Flores, una jubilada de 67 años, quien afirma que «la inflación sigue subiendo» y que «500.000 pesos de ingresos no alcanzan para nada». Sostiene que los precios «no bajan nada» y que la situación es «una vergüenza».
Estos casos ilustran cómo la percepción de los salteños dista mucho de los datos proporcionados por el Indec, generando un profundo descontento y escepticismo sobre la capacidad del Gobierno para controlar la inflación.
Mientras los números oficiales muestran una leve mejora, la realidad que viven los consumidores en las góndolas es muy diferente.