El gobierno de Javier Milei anunció la intervención del Hospital Laura Bonaparte, el único hospital mental público del Área Metropolitana de Buenos Aires. Esta medida se da luego de que más de 1.400 trabajadores fueran despedidos del centro de salud.
Según el Ministerio de Salud, la intervención se debería a un «crecimiento desmedido del personal» y al «mal manejo de los fondos», lo que habría afectado la atención y el funcionamiento del hospital.
Sin embargo, los trabajadores denuncian que el verdadero objetivo es el vaciamiento y cierre del hospital. Aseguran que entre los despedidos hay embarazadas, madres con licencia por maternidad y personas con enfermedades crónicas.
Esta no es la primera vez que el gobierno de Milei intenta cerrar el Hospital Bonaparte. En octubre del año pasado, ya había intentado tomar esa medida, pero tuvo que dar un paso atrás ante la contundente resistencia de los trabajadores y la comunidad.
Ahora, con la intervención, el gobierno busca avanzar con su plan de desmantelar este centro de salud mental que brinda un servicio fundamental para personas en situación de extrema vulnerabilidad. Los trabajadores ya han realizado asambleas y medidas de fuerza para defender la institución.
Esta nueva embestida contra el Hospital Bonaparte forma parte de la política de ajuste y vaciamiento que el gobierno de Milei está aplicando en todo el sistema de salud público. Frente a esto, los trabajadores y la comunidad se organizan para impedir que se concrete este ataque a la salud de los sectores más vulnerables.