El presidente de Colombia, Gustavo Petro, está promoviendo la conformación de un bloque latinoamericano en oposición a las políticas migratorias del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. Sin embargo, expertos consideran que la posición confrontativa de Petro no es estratégica y cuestionan la capacidad del mandatario colombiano para liderar un bloque latinoamericano consolidado que pueda contrarrestar las políticas de Trump.
Durante su visita a Haití, Petro cerró la visita con un discurso en el que criticó duramente las deportaciones masivas que se preparan en el nuevo gobierno de Estados Unidos, y llamó a la unidad de los países que se verían afectados por estas medidas. Previo a la asunción de Trump, el gobierno colombiano también se reunió con delegaciones de otros países ideológicamente cercanos para coordinar respuestas a los efectos de las políticas migratorias de la nueva administración estadounidense.
No obstante, expertos señalan que la postura de Petro podría «dinamitar la posibilidad de cooperación» entre Colombia y Estados Unidos, y sugieren que sería mejor establecer un diálogo para abordar los intereses de ambos países. Además, hay escepticismo sobre la capacidad de Petro para liderar un bloque latinoamericano consolidado, ya que países clave como Brasil y México no parecen tener interés en conformar dicho bloque.
En resumen, el artículo indica que Petro está promoviendo la conformación de un bloque antiTrump en América Latina, pero enfrenta críticas sobre la efectividad de esta estrategia y la viabilidad de concretar dicho bloque regional.