El canciller Diana Mondino y el embajador argentino en EE.UU., Gerardo Werthein, están bajo fuego tras no lograr concretar un encuentro entre Javier Milei y Donald Trump durante la última visita del presidente argentino a Washington. Fuentes oficiales admiten un creciente malestar en el Gobierno, que esperaba capitalizar políticamente una foto con el exmandatario republicano.
🤝 ¿Por qué no se dio la reunión Milei-Trump?
Según versiones internas, el equipo diplomático argentino no logró cerrar la agenda a tiempo, mientras que desde el entorno de Trump aseguran que nunca hubo una confirmación formal. El expresidente estadounidense habría priorizado otros compromisos de campaña, dejando en evidencia las limitaciones de la diplomacia argentina para gestionar este tipo de contactos de alto perfil.
Algunas hipótesis que circulan:
Fallas de coordinación de la embajada en Washington.
Trump no vio beneficios políticos inmediatos en el encuentro.
Diferencias en el timing, ya que Milei buscaba el acercamiento en un momento de baja popularidad de Biden.
💥 Las repercusiones internas
El episodio generó roces dentro del Gobierno:
🔹 Sectores libertarios critican a Werthein por no haber «presionado lo suficiente».
🔹 La oposición lo usa como ejemplo de la «improvisación» oficial.
🔹 Desde Cancillería insisten en que «no dependía solo de Argentina», pero admiten que el resultado es una derrota simbólica.
🇺🇸 El trasfondo político
Milei buscaba reforzar su imagen de aliado de la derecha global, especialmente tras su encuentro con Elon Musk y sus reuniones con think tanks conservadores. Sin embargo, la ausencia de Trump dejó en evidencia que, más allá del discurso ideológico, la diplomacia argentina sigue teniendo poco peso en Washington.
📌 ¿Qué viene ahora?
Werthein podría quedar en una posición debilitada, aunque por ahora no hay indicios de un cambio en la embajada.
El Gobierno evalúa nuevas estrategias para acercarse al Partido Republicano de cara a las elecciones estadounidenses de 2024.
La oposición aprovecha para cuestionar la «diplomacia de los gestos» de Milei, que hasta ahora no se tradujo en acuerdos concretos.