El nivel general del Índice de precios al consumidor registró un alza mensual de 3,7% en marzo de 2025, y acumuló en el año una variación de 8,6%.
En la comparación interanual, el incremento fue de 55,9%.
Muy por encima del nivel proyectado por las consultoras, la inflación de marzo subió hasta el 3,7% en marzo. Así, no solo subió por segundo mes consecutivo, sino que quebró la barrera del 3%. Esta alza estuvo impulsada por educación y alimentos, que saltaron 21,6% y casi 6%, respectivamente, según informó esta tarde el Instituto de Estadística y Censos (INDEC).
Marzo es un mes caracterizado por el inicio del ciclo lectivo que, en este caso, disparó hasta 21,6% el segmento Educación.
Pero sin dudas, la suba de 5,9% en Alimentos marcó la fuerte aceleración del IPC, ya que es la de mayor incidencia en todas las regiones. Esta fuerte suba se debió a los fuertes aumentos en verduras, tubérculos y legumbres y Carnes y derivados.
Con este dato, el IPC no solo no retomó el proceso de desinflación, que ya se había cortado en febrero, cuando se elevó al 2,4% desde el 2,2% previo, sino que es el nivel más alto desde agosto del 2024, cuando el índice fue del 4,2%. De hecho, este dato también está muy por encima del esperado, ya que las consultoras privadas calculaban entre un 2,8% o 2,9% y el REM del BCRA un 2,6%.
Para el economista Gabriel Caamaño, «la no linealidad del proceso se expresó con toda la furia en un marzo cargado por dudas sobre la continuidad del ancla cambiaria», y mencionó, como relevante sobre esta medición que «aceleraron muchos los bienes, las carnes y el resto de alimentos», y en cuando a los precios estacionales, aseveró que «dejaron de jugar a favor».
Al respecto, es importante mencionar que los precios estacionales saltaron un 8,4% seguidos de los regulados, con el 3,2%, mientras que el IPC, subió al 3,2%.