En medio del debate político en CABA, la discusión con el PRO por la alianza con La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, y el revuelo por la interpelación al jefe de gabinete Guillermo Francos en torno al caso Libra, Javier Milei disertó hoy al mediodía frente a brokers, economistas y referentes del mercado en la 12° edición de la Expo EFI y el Congreso Económico Argentino.
El presidente presentó su discurso como «una charla de crecimiento económico». En ese marco volvió a repasar cada uno de los aspectos del ajuste fiscal realizado durante el primer año de gestión, destacó el saneamiento del balance del Banco Central, e «insistió con que la fecha de defunción de la inflación son mediados de 2026».
Tanto el presidente Javier Milei como el actual ministro de economía, Luis Caputo, han sido partícipes de la Expo EFI y el Congreso Económico Argentino desde sus inicios, incluso mucho antes de incursionar en política. Conocedor de la nutrida presencia de militantes y de la simpatía que genera en el mundo de las finanzas, Javier Milei se sintió como en casa e hizo gala de todo su repertorio de epítetos dedicados a políticos, economistas y periodistas.
Con esa tónica apeló una y otra vez al insulto y la grosería, ante el beneplácito de un auditorio que lo abrazó con aplausos ante cada ironía, palabrota o referencia de corte sexual dedicado a sus adversarios.
Así fue cuando trato de «imbécil, incapaz e infradotado» al exministro de economía Martín Guzmán, cuando dijo que la oposición «la tiene adentro» por el acuerdo con el FMI, o que «los laboratorios que fabrican Adermicina están felices por en dolor de los mandriles» en relación con sus colegas economistas.
Al repasar los logros del último año, señaló que «hace 11 meses que el salario real no para subir, y la tasa de desempleo no aumentó».
Agrego que «con el enorme trabajo hecho por Sandra Pettovelo cortándole el curro a los gerentes de la pobreza y con Patricia Bullrich manteniendo el orden en la calle, esa mejora de la actividad, del empleo y de los salarios reales hizo que la pobreza cayera del 57% al 35%»
Valoró además que el conjunto de las reformas llevadas a cabo el primer año de gestión, es más grande que el implementado por el menemismo. Afirmó que el DNU 70/23 implicó 350 reformas, la Ley Bases otras 500 y que en la segunda mitad del año el ministro Federico Sturzenegger introdujo otras 900.
Sobre esa base, se animó a afirmar que «no ha habido otro gobierno más reformista en toda la historia» y en primera persona dijo que «definitivamente somos el mejor gobierno de toda la historia argentina».
En referencia a la salida del cepo, el presidente Milei afirmó que “Sabiamos que si conseguíamos u$s 12.000 millones podíamos levantar restricciones y que con u$u 15.000 millones podíamos abrir el cepo. Terminamos logrando acuerdos totales por u$s 42.000 millones” afirmó..
En ese pasaje del discurso vertió sus críticas más duras a los detractores del programa económico, a quienes señalo como «enemigos de la patria que por 100 años se aprovecharon del sistema empobrecedor».
A todos ellos, el presidente refirió como «los empresarios prebendarios, los políticos corruptos, los periodistas en sobrados, los sindigarcas y los profesionales funcionales a este conjunto de hijos de puta que cagaron el país».
Al referirse a los datos de inflación, Milei señaló que «La política monetaria actúa con un rezago que oscila entre 18 y 24 meses». Agregó que «nosotros hemos fijado la cantidad de dinero a mitad del año pasado, eso quiere decir que la inflación tiene fecha de defunción y es a mitad del año que viene».
Volvio a burlarse de los economistas que anticipan problemas para acumular reservas debido a las bandas de flotación y el atraso cambiario que aún se sostiene. «Los libros que yo leía no mordían», señaló en referencia a sus colegas a los que trató literalmente de «pelotudos».
«Nosotros recapitalizamos el Banco Central, vamos a salir a los mercados porque el riesgo país ya está debajo de 700, y además tenemos un put que nos puso el gobierno americano», fundamentó su certeza de que las reservas no están en riesgo.