Recientemente, la relación entre el PRO y el partido libertario La Libertad Avanza (LLA) ha sido marcada por conflictos y acusaciones en varias localidades, lo que pone en jaque los acuerdos políticos en la provincia.
Conflictos en el terreno
En 9 de Julio, el concejal Luis Moos ha impulsado denuncias penales y un pedido de destitución contra la intendenta PRO, María José Gentile. Estas acciones están motivadas por supuestas irregularidades en la gestión anterior y por el uso indebido de terrenos municipales. Moos, que ha hecho una transición del peronismo al libertarismo, ha encontrado en estas denuncias una forma de consolidar su influencia política.
La situación en Junín y Pergamino
En Junín, el concejal libertario Juan Manuel Cornaglia se abstuvo de apoyar la rendición de cuentas del intendente Pablo Petrecca, acusándolo de manejar los fondos de manera opaca. Esta postura resalta las diferencias ideológicas profundas que existen entre los libertarios y los funcionarios del PRO, dificultando cualquier posibilidad de colaboración.
Por su parte, en Pergamino, La Libertad Avanza ha cuestionado la rendición de cuentas del intendente Javier Martínez, lo que ha llevado a una creciente polarización en el concejo deliberante.
¿Un futuro incierto?
A pesar del apoyo que muchos intendentes del PRO han brindado al acuerdo con los libertarios, existe un claro descontento respecto a la influencia de LLA en sus gestiones locales. Los intendentes solicitan mayor autonomía para armar sus listas electorales, temiendo que las decisiones centralizadas por los libertarios obstaculicen sus iniciativas.
Corolario
Las tensiones actuales entre el PRO y los libertarios reflejan un panorama político complicado, donde las denuncias y los pedidos de destitución podrían socavar la estabilidad de las alianzas en los municipios.
A medida que estas dinámicas se desarrollan, será crucial observar cómo afectarán la gobernabilidad y la capacidad de ambos grupos para trabajar juntos en el futuro.