En un anuncio sorpresivo realizado el lunes por la noche, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró un alto el fuego entre Israel e Irán, tras casi dos semanas de intensos enfrentamientos.
“El mundo y Medio Oriente son los verdaderos ganadores”, escribió en su red Truth Social, expresando su esperanza de que el acuerdo sea “completo, total y permanente”.
El acuerdo logrado entre Irán e Israel
Según fuentes diplomáticas, Qatar jugó un papel clave como mediador entre las partes, facilitando las conversaciones con Irán.
Un alto funcionario de la Casa Blanca confirmó que Israel aceptó el alto el fuego bajo la condición de que Irán detuviera sus ataques contra territorio israelí. Irán, por su parte, aceptó esos términos, aunque su cancillería aclaró que la decisión final dependería de que Israel cesara sus “agresiones ilegales” antes de las 4:00 a.m. hora de Teherán.
Oficialmente, no se confirma el alto al fuego
Aunque Trump celebró el acuerdo como un “logro histórico”, la situación sobre el terreno sigue siendo tensa.
Israel reportó nuevos ataques con misiles desde Irán horas después del anuncio, y medios iraníes informaron bombardeos israelíes en Teherán.
Aún no hay confirmación oficial del alto el fuego por parte de los gobiernos de Israel o Irán.
Gesto simbólico o un verdadero punto de inflexión
La comunidad internacional observa con cautela. Mientras algunos analistas ven en este anuncio una oportunidad para desescalar el conflicto, otros advierten que sin compromisos firmes y verificación mutua, el alto el fuego podría ser efímero.