Este domingo 13 de julio, la Virgen de Andacollo de Tamberías fue protagonista de una jornada cargada de devoción y tradición. Desde la capilla de la localidad partió la procesión que, a lo largo de 7 kilómetros, recorrió calle Eugenio Flores hasta llegar al centro de Jáchal, acompañada por una multitud de fieles, promesantes y agrupaciones de danzantes y “chinos” llegados desde distintos puntos de la provincia.
Grupos de Calingasta, Rawson, Albardón, Huaco, Chimbas y Tamberías dijeron presente, sumando su música, color y espiritualidad a esta expresión de fe que une generaciones.
El paso por cada calle fue acompañado por gestos de solidaridad: familias y vecinos se acercaron con agua, mate cocido y sopaipillas, en una muestra del espíritu generoso de nuestro pueblo.
Durante todo el trayecto, desde el municipio acompáñamos con nuestro equipo de prevención, enfermeras del área de Salud, agentes de Protección Civil y la Policía Municipal, trabajando para cuidar la integridad de los peregrinos y garantizar un recorrido seguro.
Uno de los momentos más emotivos se vivió cuando San José salió al encuentro de la Virgen en calle 25 de Mayo y Juan de Echegaray. La emoción de ese cruce acompañó a ambas imágenes hasta el Santuario Arquidiocesano, donde los fieles atravesaron la Puerta Santa y compartieron la Misa del Jubileo, presidida por el obispo auxiliar Mario Héctor Robles.
Fue una jornada de unión profunda, donde la tradición se mantuvo viva en cada paso, en cada danza y en cada oración.
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