las restricciones economicas
La SIDE colabora con la AFIP para controlar el flujo de dinero
Más de una decena de agentes cruzan datos fiscales con información de inteligencia. Bancos y particulares en la mira, en tiempos de pocos dólares.
En plena corrida bancaria, un equipo de sabuesos de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) comenzó a trabajar en tándem con los espías de la Secretaría de Inteligencia (ex SIDE) y con la Unidad de Información Financiera (UIF) para “analizar información vinculada al movimiento de divisas para detectar operaciones en las que se sospeche lavado de activos y/o financiamiento del terrorismo”.
Bajo ese paraguas legal, el jefe de la AFIP, Ricardo Echegaray, reclutó a agentes que habían participado en septiembre de 2009 del megaoperativo de inspección impositiva en las oficinas del Grupo Clarín. Se trata de más de una decena de funcionarios que trabajan en las oficinas de la agencia y que articulan información con la que aporta la Secretaría de Inteligencia.
Las últimas inspecciones que realizó la AFIP a grandes empresas no son producto de la casualidad ni de una serie de procedimientos de rutina. Por el contrario, se trataría de un plan diseñado a los apurones para salir a cazar supuestos evasores y aleccionar a empresarios críticos a las medidas para profundizar el modelo.
En el Boletín Oficial del 4 de este mes se publicó la disposición de la AFIP 388/2011, en la que se dispuso la creación de la “unidad orgánica con nivel de Dirección denominada Investigación Financiera”. La norma fue firmada por Echegaray el día 2, corría el segundo día de vigencia de las nuevas normas cambiarias y un pelotón de sabuesos de la AFIP controlaba en el microcentro porteño la escasa actividad en las casas de cambio.
Ese día se profundizó la brecha entre el dólar minorista, que había subido un centavo a 4,27 pesos, y el marginal, que llegó a 4,63. La sangría de las reservas persistió a pesar de las restricciones a las operaciones y el Banco Central informó que llegaron a los 47.424 millones de dólares, con una caída de 4.578 millones en los últimos tres meses. El clima en la Casa Rosada era de incertidumbre.
“Resulta necesario profundizar la actuación coordinada de esta Administración Federal, no limitándose a proveer los datos indicados en el plexo normativo específico, sino también instrumentando los mecanismos necesarios para colectar la información relacionada con estos flagelos sociales y estableciendo las acciones preventivas dentro del marco de sus competencias”, se lee en los considerandos.
Una de las tareas de la flamante unidad de sabuesos es “realizar relevamientos y desarrollar acciones de investigación y fiscalización a entidades financieras y sectores vinculados a operaciones que involucren el empleo de divisas, acciones, bonos y demás títulos valores y todo tipo de crédito, a efectos de prevenir infracciones cambiarias, de lavado de activos y financiamiento del terrorismo”.
Los agentes de la Secretaría de Inteligencia entran en acción gracias al punto quinto de la norma: “Solicitar colaboración a otros organismos públicos y de fuerzas de seguridad para el cumplimiento de sus funciones”.
Un funcionario de la AFIP, que pidió que su nombre sea reservado, explicó a PERFIL que “hay actividades que ya se venían realizando, pero la creación de la dirección de Investigación tiene un trasfondo más político. Detrás está la gente que respondía a Vázquez”. Se trata de Andrés Vázquez, el contador que ocupaba la dirección de la Regional Sur y tuvo a cargo la ejecución de las inspecciones que realizó la AFIP en 2009 sobre el área donde funciona el diario Clarín.
Un año después de ese escándalo y del apartamiento de Vázquez de la AFIP, al funcionario se le inició una investigación judicial por girar casi medio millón de dólares al exterior a través de una “cueva financiera” del banco BNP Paribás en una operación no declarada ante las autoridades bancarias e impositivas. Por este motivo, el fiscal Federico Delgado pidió la indagatoria del funcionario y del secretario general del Sindicato de Aduaneros, Carlos Alfredo Sueiro, también investigado por haber depositado dinero en cuentas bancarias en Suiza y Luxemburgo mediante transferencias no registradas.
Vázquez no era ningún desconocido en la AFIP. Funcionario de carrera, supo acomodarse a las conducciones de turno. Aunque su gran secreto y herramienta principal se convirtió, dentro de los pasillos de la DGI, en una verdad irrefutable: sus conexiones con la SIDE.
FUENTE: PERFIL