Es porque los controladores aéreos trabajan a reglamento, en apoyo a cinco compañeros que fueron desplazados del sector. La medida provoca retrasos en todas las operaciones y algunos servicios fueron reprogramados.
Los vuelos de cabotaje vuelven a operar hoy con demoras en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery a raíz de una medida de fuerza de los controladores aéreos, quienes trabajan a reglamento en apoyo a cinco compañeros que fueron desplazados de la Torre de Control.
La medida provoca retrasos en la mayoría de los servicios, muchos de los cuales debieron ser reprogramados por las compañías «para no cancelarlos y perjudicar a los pasajeros», explicó una fuente de Aerolíneas Argentinas.
El trabajo a reglamento de los controladores, que llevan adelante desde hace días, obligó a desviar hacia el aeropuerto internacional de Ezeiza vuelos programados para aterrizar en el aeroparque porteño. En tanto que otros sufrieron retrasos de hasta tres horas.
Ayer, la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA) manifestó en un comunicado su «solidaridad con los compañeros desplazados de la Torre de Control del Aeroparque Jorge Newbery y el aeropuerto Taravella de Córdoba».
«Consideramos que no hay razón alguna para adoptar semejante medida, ni en lo laboral ni en lo profesional», expresó el parte firmado por el secretario general de APTA, Ricardo Cirielli.
En ese sentido, sostuvo que la «Asociación repudia los hechos por ser arbitrarios y discriminatorios, y atentar directamente contra los derechos de los trabajadores con procedimientos abiertamente dictatoriales y ominosos, persiguiendo y castigando a los trabajadores».
(DyN)