Ya sabemos que cuando llega el otoño empiezas a ver venir futuros negros, porque las estaciones nos afectan mucho (estudiado) y siempre pretenden consolarte con un: “Tranquilo, que para la primavera-verano no queda tanto y verás que no será para tanto”. Depende de cada caso, puede que si o puede que no. Cuando se adentra el otoño y los días son más cortos, ves que te vienes para abajo. La luz natural es otro antidepresivo natural además del “buen tiempo”. El invierno pasa sin querer acercarte ni a una lumbre que calienta, contando los días para que el cambio de estación se produzca y paren esas estaciones que te “mantienen” pero no vives. ¿Podríamos llamarlo hivernar? Eso si, con matices y sufrimientos varios, pero solo deseas que los días se hagan más largos. Además, ¿quién pensó en el cambio de hora invernal? Te pasas días o semanas totalmente desorientado. Pero bueno, las estaciones fatídicas se van.
Las estaciones suelen afectarnos, puedes ir arriba o te llevan hacia abajo
Llega la primavera, el sol calienta, la luz del día se alarga.Pueden darse tres casos y cada persona es un mundo y me baso en lo que me ha pasado a mi (los tres precisamente). Que sigas sumido en la depresión, que mejores y lo veas todo mejor o te dé una manía que no te esperas, pero entre estaciones (primavera y verano). Lo frustrante es que vas esperando los cambios de estaciones pero tu estado de ánimo es el mismo, depresivo, pero te dicen que el verano está cerca y sigues igual. Puedes ir contando estaciones que la cosa no mejora radicalmente, sino que irás de un poco mejor a un poco peor a muy mal. Total, que ya piensas que ni las estaciones te aliviarán, pero si te hundirán más, como es el caso del otoño e invierno. No recuerdo qué es una manía y, fíjate que, hasta echo de menos una, porque no encuentro el equilibrio. Las cosas cada vez dejan de ilusionarte. Ni lo que más te ha enriquecido o enriquece a nivel emocional empiezas a dejar de darle valor. Hagas lo que hagas, si es que puedes, lo haces por inercia y de manera autómata. Precisamente escribo este post por un compañero del foro del cual, se puede decir que es uno de los míos, a la espera del ansiado equilibrio.
Los otros dos casos no entraré, ya que muchos sabemos lo que es pero el tercero, cuando nada cambia en unas cuantas estaciones seguidas, pese a que tu médico se esfuerza en que no sea así y tú también, pierdes la fe, te frustras y te haces ciertas preguntas, de las cuales, algunas son peligrosas. Obviamente, no solo las estaciones influyen en el Trastorno Bipolar, pero si es cierto que, además, si lo orgánico no ayuda y lo ambiental deja mucho que desear y a tu vida le dejas de ver sentido, acabas en una espiral peligrosa. Pero es una batalla entre el trastorno y tú en la que has de pensar que la vas a ganar, sino, estamos perdidos.
Concluyendo, las estaciones influyen y a mi siempre me han afectado, para bien como para mal, pero desde hace tiempo parece que solo viva en una misma estación. La estación de las estaciones. Como dice un libro (convertido en serie) y me digo a mi mismo cuando está cerca: “Winter is comming” porque lo define a la perfección. Tengo que conseguir mi estación buena y reconvertirla en la estación de las estaciones y dejar de decirme y tenerle miedo a la frase: ”Winter is comming”. Eso si, estamos a esta alturas de fechas y me vuelvo a repetir reiteradamente: “Winter is comming”. Así que por ahora, no desesperaré (pese a que muchas veces quiera y haya querido rendirme) porque puedo ir perdiendo batallas, pero la guerra la acabaré ganando.
Seguimos en pie.