Las autoridades de Madrid han recibido 35 solicitudes para realizar manifestaciones. La más grande comenzará cerca de la estación de Atocha, a donde llegarán las seis columnas de activistas que llegarán de toda España e incluso del extranjero.
Según ha destacado la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, el 22 de marzo se espera un día «complicado», informa ‘El País’. Cifuentes ha recomendado a los ciudadanos utilizar ese día el transporte público, especialmente el metro.
Miles de personas atraviesan España para exigir en la capital «pan, techo y trabajo». Españoles están también llegando a Madrid desde más lejos: Londres, Oslo, Bruselas, Praga, Edimburgo, Fráncfort, Viena, Berlín y otros lugares lejanos. Solo en Madrid 150 colectivos locales han confirmado su participación.
«Estamos reivindicando trabajo, que es lo que hace falta, para que luego no echen a la gente de sus casas. Pedimos la renta básica para la gente que se le acaba el paro y ya no tiene posibilidades de nada, para que las familias puedan comer», dice José Castillo Soriano de Yecla.
Se reúnen para pedir la dimisión del Gobierno, trabajo y vivienda para todos, un estado de bienestar para la gente mayor, la dación en pago con carácter retroactivo, etc.
«Es una legislación criminal, que está matando a la gente. Esta semana se suicidó otra persona en Badajoz y no podemos permitir que se cometan estas injusticias. Esto va a ser otro escándalo como no se tomen medidas, y esa es una de las reivindicaciones, la dación en pago con carácter retroactivo», explica a RT el activista Paco Alarcón.
Se espera la participación de los afectados por la hipoteca, parados y trabajadores, bomberos, pensionistas, colectivos sociales y ecologistas.
Uno de los manifestantes, Cristóbal Crespo García, de Murcia, afirma que está en contra de los cambios constitucionales: «Se cambió el artículo 153 de la constitución, para que la deuda fuera prioritaria sobre otra cosa. Quiere decir que la deuda hay que pagarla sea como sea, aunque sea a cambio de hambre, y recortes en sanidad, en educación, y otros servicios básicos. Con lo cual se está atentando contra los derechos humanos para pagar una deuda a los bancos. Una deuda que no la hemos contraído el pueblo sino los políticos».
«Son marchas para defender la dignidad de las personas, de todas las personas que estamos sufriendo los recortes, la precariedad, el desempleo, los desahucios», dijeron participantes de las columnas a RT.
Ellos mismos no saben cuándo va a terminar su acción social, pero se habla de protestas el 24 de marzo.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/122886-madrid-marcha-dignidad-22m