Por la escasez de divisas, la alta inflación y el temor a una nueva devaluación en Venezuela, varias líneas aéreas como Air France, Aerolíneas Argentinas, American Airlines, LAN Perú, entre otras, optaron por reducir aún más las frecuencias de vuelos.
Pero lo llamativo, en el caso de la línea aérea de bandera, es que si alguien quiere comprar un pasaje hacia cualquier destino de la Argentina para el verano de 2015, eso no es posible porque los pasajes no se venden con una anticipación mayor a 30 días, un límite tres veces menor al de 90 días que American Airlines impuso en nuestro país.
Según indica en su edición de hoy el diario La Nación, la explicación que un agente de ventas de Aerolíneas Argentinas le brindó a un interesado que llamó para comprar un pasaje para febrero fue simple: «Es que no sabemos a cuánto va a estar el dólar».
Incluso, en la página de internet de la aerolínea, quienes ingresan en el servicio “Venezuela”, encuentra dos diferencias respecto de las otras 17 opciones. La primera: las ofertas están expresadas en millas y no en dólares. La segunda es que la reservas online de pasajes está desactivada hasta nuevo aviso.
Según pudo comprobar Infobae, al querer hacer una reserva, el usuario encuentra el siguiente mensaje: «Hasta nuevo aviso se mantendrá desactivado el motor de reservas».
Voceros de la empresa consultados dijeron que «se trata de un problema técnico de la web» y que están trabajando para solucionarlo. Sin embargo, para el resto de los países el «motor de reservas» funciona sin problemas.
Según el matutino, desde Aerolíneas Argentinas justificaron el límite de 30 días para la venta de pasajes, al sostener que la compañía “aplica en Venezuela la misma política que el resto de las líneas aéreas que operan en dicho destino».
Para Fernando Dozo, ex gerente de Política Aérea en Aerolíneas, las medidas tomadas por esa empresa en Venezuela y por American Airlines en la Argentina «son comunes en países con restricciones cambiarias donde no se pueden girar libremente las ganancias».
Para el experto, ante la incertidumbre de una devaluación, las empresas optan por acotar su riesgo y, por tanto, la decisión de Aerolíneas y de American «es el comportamiento de una empresa razonable».
Esta situación de la aerolínea de bandera se conoce semanas después de que Cristina Kirchner llamara «buitre con turbinas» a American Airlines por restringir la venta de pasajes en la Argentina por el cepo cambiario.