Extásis. Ésa es la droga que tenían en el organismo todos los jóvenes intoxicados en la fiesta electrónica de Costa Salguero. En casi todos estaba combinada con cocaína, y en uno, con hasta otras tres sustancias, incluidas anfetaminas, de acuerdo con la reconstrucción que pudo hacer ayer LA NACION.
Ni los familiares y amigos de los cuatro varones y una mujer de entre 17 y 25 años que permanecen internados en estado crítico en tres hospitales porteños podían recordar, por su complejidad, la lista de sustancias que les habían mencionado los médicos después de los primeros análisis de laboratorio.
Otros cinco jóvenes, de entre 20 y 25 años, no lograron salvarse. Murieron durante la primera noche de lafiesta Time Warp en el predio de Costanera Nort e o en los hospitales Fernández y Rivadavia. Pero los síntomas de la descompensación que sufrieron los 10 intoxicados coinciden: aumento de la temperatura corporal, deshidratación, convulsiones, aceleración de los latidos cardíacos, mareo, aumento de la presión y dificultad para respirar.
Ayer, en el hospital Rivadavia, los padres de Damián Sedeillán, de 17 años, aseguraron a LA NACION en el pasillo que da a la unidad de terapia intensiva que su hijo no recordaba lo que había pasado ni lo que había sentido o vivido. Le tuvieron que mostrar la tapa de un diario para que se convenciera de lo que le estaban contando.
En los hospitales Fernández y Argerich permanecen internados en estado crítico tres varones y una mujer que consumieron las drogas que les ofrecieron durante la fiesta. Los dos varones y la mujer en el Fernández tienen insuficiencia renal y uno de ellos, como el paciente del hospital de La Boca, están con asistencia respiratoria.
Uno de los jóvenes que murieron, Martín Bazzano, era uruguayo y había viajado a Buenos Aires con una veintena de amigos para asistir al festival. El grupo había llevado sus propias dosis y lograron evadir los controles de seguridad al esconderlas en la ropa interior. Martín, en cambio, prefirió llevar el dinero y comprarlas durante el evento, según pudo saber LA NACION.
«Evidentemente, el grupo tenía el cuerpo acostumbrado al consumo y conocía qué dosis debía tomar para lograr cierto efecto -explicó un profesional, que prefirió mantener en reserva su nombre porque no participó en la atención de los jóvenes, pero atendió casos similares-. Acá, redoblaron el consumo hasta dos y tres veces para obtener el mismo efecto con una droga que estaba rebajada. Eso desencadenó este estrago.»
Las autopsias revelaron que los jóvenes fallecidos sufrieron de un edema pulmonar que les causó un paro cardiorrespiratorio. Nada se precisa sobre qué desencadenó la complicación pulmonar, que impide respirar debido a la acumulación de líquido en los pulmones por, en estos casos, la imposibilidad del corazón de bombear sangre al resto del cuerpo.
Oscar Olego, especialista en adicciones, explicó que sólo el éxtasis y la cocaína ya son dos drogas que actúan sobre el sistema nervioso simpático. A través de los receptores de la dopamina en el cerebro, aceleran todas las funciones del cuerpo. Los efectos de su combinación pueden ser tan graves como causar la muerte súbita. Eso, justamente, es lo que está dejando de ser infrecuente.
De acuerdo con información epidemiológica del hospital Fernández, en 2014 hubo 82 muertes súbitas por sobredosis.
«Los chicos necesitan tomar agua, que puede costar hasta 80 pesos a medida que avanza la fiesta, empiezan a transpirar, no tienen cómo compensar ese desequilibrio y entran en un estado de deshidratación aguda», dijo Olego, presidente honorario del Capítulo de Psiquiatría Biológica de la Asociación de Psiquiatras Argentinos (APSA).
Desde su experiencia, apuntó al consumo de MDMA (metilendioxi-metanfetamina) o éxtasis combinado con agregados para potenciar la sensación de euforia. Recordó que la Organización Mundial de la Salud ya reconoció en su último informe mundial sobre la producción de drogas sintéticas ilegales el uso de más de 400 sustancias químicas sólo para aumentar ese efecto vigorizante.
Por eso, ayer, en los tres hospitales se seguía indagando con intervención judicial qué sustancias químicas habían ingerido exactamente los jóvenes, incluidos los productos utilizados para «rebajar» o «cortar» las drogas de diseño.
Entre ellos, ayer por la tarde circuló el nombre brodifacoum, que se utiliza como ingrediente activo de raticidas. Los comentarios, que se atribuyeron a fuentes médicas de uno de los hospitales que participaron de la asistencia a los intoxicados, indicaban que algunos de los pacientes estaban recibiendo un antídoto (de acuerdo con la literatura médica, suele ser una vitamina K).
LA NACION intentó confirmar la versión, pero sólo pudo saber que, hasta anoche, aún no se podía asegurar que se tratara de un veneno para ratas. Tampoco se negó el uso de un antídoto.
Los especialistas consultados opinaron que lo más peligroso es «el boca a boca» entre los chicos, la complicidad de los padres y el hecho de que todos sepan que no se conciben las fiestas electrónicas y raves sin drogas pero no se actúe para evitar consecuencias lamentables.
«Los chicos siempre dan señales de que algo pasa cuando consumen cualquier droga. Al día siguiente eso se ve, pero los padres lo niegan o lo dejan pasar. Las drogas sintéticas son cada vez más potentes, baratas e impuras en un contexto de consumo contagioso», finalizó Olego.
Anoche, la investigación sobre Time Warp pasó al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 7. Con objeto de reconstruir los hechos y aclarar qué tipo de consumos hubo en la fiesta, se convocó a «todo aquel que desee suministrar datos de interés en relación con los sucesos, aclarando que contarán con las medidas de protección necesarias y que podrán hacerlo con reserva de identidad», a comunicarse a los teléfonos 4032-7153/7841/7151/7152 y al correo electrónico jncrimcorrfed7.sec13@pjn.gov.ar «.
Otros festivales con el mismo escenario
«Costa Salguero, pabellón 5, sábado 30 de abril de 2016 desde las 22.» Son las coordenadas que se publicitan por Internet para otro evento masivo clasificado como «futurista». El mismo escenario donde murieron cinco jóvenes, que por el momento permanece clausurado.
Se trata del Diynamic Festival 16, en el que, según la promoción, actuarán los DJ Solomun, Adriatique, HOSH, Karmon y Stimming. La entrada general cuesta $ 475.
El sábado 23, en tanto, el famoso DJ y productor holandés de música house Dash Berlin se presentará en Mandarine Park, en Punta Carrasco, otro complejo en la Costanera Norte.
fuente LA NACIÓN