Hugo Moyano está dispuesto a recuperar los afiliados que perdió a partir del quiebre de su alianza con el kirchnerismo, en 2012. Su hijo Pablo, que es número dos del sindicato de los camioneros, confirmó a LA NACION la estrategia, que está en marcha hoy, con una protesta en una de las sedes del Ministerio de Trabajo por el encuadramiento gremial de 1000 empleados de la cadena de supermercados Maxiconsumo.
El gremio de camioneros considera que los trabajadores que cumplen tareas de logística deberían estar alcanzados por el convenio colectivo 40/89 y no por el de los mercantiles. «Vamos a recuperar todo lo que perdimos con [Carlos] Tomada», advirtió Pablo Moyano, que encabeza la protesta de hoy en la sede laboral de Callao al 100.
La empresa Maxiconsumo amenazó con cerrar más de 30 sucursales que tiene en el país, lo que significaría la pérdida de 1800 puestos de trabajo, si el gremio de Moyano continúa con los bloqueos que impiden el ingreso o egreso de vehículos de carga a sus bocas de expendio. Así lo informó a la agencia Télam el titular de la compañía, Víctor Fera.
Como aliado del kirchnerismo, y gracias a una reforma estatutaria convalidada en 2003 por el Ministerio de Trabajo, Moyano logró multiplicar sus adherentes hasta convertir a su sindicato en uno de los más poderosos del país. La ex viceministra laboral Noemí Rial definió por entonces al jefe de los camioneros como un «Pac-man», por el modo compulsivo de quitarles afiliados a otros gremios.
A partir de 2012, cuando Moyano oficializó su ruptura con Cristina Kirchner, el Ministerio de Trabajo dejó de avalar la estrategia del camionero, y así se abrió una saga de conflictos por encuadramiento que todavía hoy persisten. Uno de ellos es el de Maxiconsumo, una cadena mayorista que ya sufrió el bloqueo de sus 37 sucursales por parte de los camioneros. El conflicto lleva tres años.
La empresa reclamó ayer la intervención de algún jerárquico de la cartera que encabeza Triaca. Surge una ironía: en 2013, cuando estalló el conflicto por el encuadramiento de los empleados de Maxiconsumo, fue el subsecretario de Trabajo porteño, Ezequiel Sabor, quien ofició de mediador para evitar por entonces un paro de los camioneros. Hoy, Sabor es el número dos de Triaca.
Pablo Moyano reclamó ayer un encuentro con Sabor y amenazó con paralizar la distribución de alimentos en los supermercados mayoristas. La postura combativa de los Moyano podría endurecerse en las próximas semanas, cuando comience la negociación salarial con la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Carga (Faddeac), Los empresarios ya advirtieron de las complicaciones para otorgar un aumento en línea con lo que fueron las subas de los costos y la inflación. Hay un problema en puerta.
La tropa de Moyano mantiene abiertos otros conflictos similares al de Maxiconsumo, pero contra otros gremios. Dos ejemplos: con Alimentación, por los trabajadores de la empresa de catering Gate Gourmet, que aprovisiona de alimentos a los aviones, y con el Sindicato de Tintoreros, por el encuadre de los trabajadores de los lavaderos.
Quieren sacarle los fueros a De Vido
Un grupo de diputados de Pro presentó un proyecto en la Cámara baja para que se le quiten los fueros al ex ministro de Planificación y actual diputado Julio De Vido. Pretenden que se pueda realizar un allanamiento en el departamento de la avenida Del Libertador 2275/77 piso 10, donde vive el ex funcionario. Allí se suspendió, el 29 de abril, un procedimiento judicial por los fueros de De Vido.
La iniciativa de los diputados macristas plantea que los fueros se suspendan sólo para este procedimiento en particular y no definitivamente. Se trata de un allanamiento en subsidio que dispuso el juez Luis Rodríguez, en una causa por enriquecimiento ilícito contra el ex ministro de Planificación. Algunos de los firmantes del proyecto son Pablo Tonelli, Eduardo Amadeo y Waldo Wolff.
fuente LA NACIÓN