ESQUEL.- Con un sabor amargo por el hallazgo de un cuerpo sin vida, aunque con la tranquilidad de haber dado un paso crucial en la investigación, ayer el juez Gustavo Lleral manifestó a LA NACION su confianza en que la autopsia y la aplicación de técnicas científicas sobre los restos encontrados revelarán qué fue lo que ocurrió con el joven tatuador desde que fue visto por última vez, el 1º de agosto, en el Pu Lof de Resistencia en Cushamen.
«El cuerpo va a hablar. Va a decir cuál es la identidad de esos restos y a hablar sobre qué fue lo que le pasó hasta llegar a ese lugar», dijo el magistrado.
Ayer, Lleral se mostraba muy preocupado por conservar la cadena de custodia del cuerpo hallado en el río Chubut, cerca de la «zona cero» o el «punto cero» de la pesquisa. De hecho, la decisión de remover el cuerpo del lugar en horas de la noche, aunque no en condiciones óptimas, obedeció a la necesidad de garantizar que nada les pasara a esos restos.
Las dudas que se mantienen
Lo mismo ocurrió durante todo el día de ayer: el traslado del cadáver hacia Buenos Aires se demoró porque se buscó limpiar de posibles interferencias el trayecto hacia el avión de la Prefectura y, luego, hacia la morgue de la Corte, en Buenos Aires.
«El cuerpo va a decir cuál es la identidad de estos restos y hablará sobre qué fue lo que le pasó hasta llegar a ese lugar»
Gustavo Lleral, juez federal
En una jornada sumamente agitada, el juez tomó otra medida y decidió ocuparse de la filtración de las fotos del cadáver que fue encontrado en el río Chubut, que circularon por algunos medios y redes sociales.
Según pudo conocer LA NACION de fuentes judiciales, Lleral abrirá una pesquisa anexa al caso principal para buscar a los responsables de la difusión de esas sensibles imágenes. En ese sentido, en la conferencia de prensa que brindó la familia Maldonado anoche, pidieron por favor evitar la reproducción de las imágenes y respetar a la familia.
Desde ayer temprano se comenzaron a viralizar como reguero de pólvora imágenes del cuerpo que fue hallado ayer en el Pu Lof de Resistencia en Cushamen, que guarda características similares a las de Santiago Maldonado, si bien todavía no se realizó la identificación oficial.
En el juzgado, la difusión de las imágenes provocó enojo e indignación, luego de que se trató de custodiar al máximo todo lo referido al cuerpo. A ese estado de ánimo se sumó un llamado de los familiares de Maldonado, que le recriminaron a la Justicia lo sucedido y le pidieron que arbitre medidas para preservar la intimidad de la familia en este momento de dolor.
En el juzgado creen poder identificar al autor de la filtración. En el lugar donde se tomaron las fotografías del cuerpo sólo estaban el juez Lleral, el perito de la familia Alejandro Inchaurregui y dos miembros de la Policía Federal.
Lleral llegó a la causa hace más de tres semanas, luego de la remoción de su antecesor Guido Otranto. Luego de interiorizarse del extenso expediente, lideró la pesquisa de anteayer, que había sido pedida por la fiscal Silvina Ávila.
fuente LA NACION