Julio De Vido salió al cruce de las acusaciones contra su hijo Facundo por haber obtenido beneficios de una empresa que recibió pagos por la realización de obras en la mina de carbón de Río Turbio (YCRT), como publicó anteayer LA NACION, sobre la base de documentos reservados de la Unidad de Información Financiera (UIF) que obran en el expediente judicial.
En un comunicado que firman sus abogados Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro señalan que «no hay ningún elemento concreto que permita sostener que uno de los hijos de Julio De Vido, Facundo, ha sido beneficiario de fondos públicos de YCRT o que estaban destinados a la mina de Río Turbio».
Indicó que la publicación se trata de «una conducta, cuando menos, temeraria por parte de los medios de comunicación».
Los letrados dicen que es falso que Facundo De Vido haya cobrado, de manera directa o indirecta, fondos públicos destinados a YCRT, por lo que no es cierto que haya sido beneficiario de nada. Dijeron que el hijo de De Vido no trabaja ni trabajó nunca en el Ministerio de Salud de la provincia de Santa Cruz ni en YCRT, tanto de manera directa como indirecta.
Y señalaron, además, que «no es cierto que la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones haya utilizado el informe de inteligencia secreto de la UIF, entre otras cosas y fundamentalmente porque jamás lo pudo haber visto. Ese informe se incorporó al expediente una vez que regresó al juzgado de origen del doctor Rodríguez; esto es, en forma posterior a la resolución».
La mención judicial
No obstante, el informe de la UIF está mencionado en los fallos de la Cámara Federal que confirmaron el procesamiento con prisión preventiva contra De Vido por el fraude de Río Turbio y le negaron la excarcelación. Lo cita el juez Martín Irurzun en la página 9 de la primera sentencia y en la página 4 de la segunda.
El informe de la UIF 784/17 señala que una de las empresas que cobró cheques de la fundación ligada a la UTN, que recibió el dinero para las obras, autorizó a Facundo De Vido a conducir una camioneta Nissan Murano. Y la UIF sostiene que este dato le «permite inferir que uno de los beneficiarios detrás de la sociedad JI SA sería Julio De Vido y/o su entorno familiar».
fuente LA NACION