Unos 68 muertos dejó un incendio registrado la madrugada de este miércoles en calabozos policiales en la ciudad venezolana de Valencia, confirmó la Fiscalía, que abrió una investigación sobre los «dramáticos hechos».
«En las indagaciones preliminares los resultados arrojan el fallecimiento de 66 hombres y dos mujeres que se encontraban en calidad de visitantes (pernocta)», informó el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, en Twitter.
El funcionario indicó que «ante los terribles hechos acaecidos en la Comandancia de la Policía del estado Carabobo, donde por un presunto incendio fallecieron 68 personas: hemos designado cuatro fiscales para esclarecer estos dramáticos hechos».
Saab sostuvo que el Ministerio Público «profundizará» las investigaciones «para esclarecer de forma inmediata estos dolorosos acontecimientos que han enlutado a decenas de familias, así como establecer las responsabilidades a que haya lugar».
«Unos fallecieron calcinados y otros por asfixia», dijo Carlos Nieto, director de la ONG Una Ventana a la Libertad
El incidente se produjo en la mañana durante un intento de fuga en las celdas de la policía del estado Carabobo. Los detenidos habrían prendido fuego a colchones y despojado de su arma a un funcionario, informó la ONG Una Ventana a la Libertad.
Según Carlos Nieto, director de la ONG «unos fallecieron calcinados y otros por asfixia», dijo a la AFP.
Una fuente del Ministerio de Servicios Penitenciarios consultada por la AFP aseguró no estar en conocimiento de los hechos, aduciendo que esa cartera solo se ocupa de monitorear las cárceles nacionales.
En medio de la confusión, familiares intentaron ingresar a la sede policial -que depende de la gobernación del estado Carabobo- y durante el forcejeo un funcionario fue herido con una piedra. La protesta fue dispersada con bombas lacrimógenas.
Más tarde la Gobernación expresó en una nota de prensa su solidaridad a los familiares de las víctimas fatales y aseguró que dará apoyo «con los servicios funerarios y posterior sepultura de los reclusos fallecidos».
Nieto afirmó que lo ocurrido «no es una situación aislada», pues «todas las comisarías de policía de Venezuela están viviendo condiciones iguales o peores de hacinamiento, falta de alimentos y enfermedades».
Hace 13 días en un calabozo en la turística isla de Margarita, al norte de Venezuela, 58 presos escaparon por un boquete que abrieron en un muro.
Los presos -que fueron recapturados- huyeron a través de un agujero de aproximadamente 60×40 centímetros que abrieron en una pared.
El hacinamiento en las cárceles de Venezuela obliga a los cuerpos de seguridad a utilizar centros policiales, donde los detenidos no deberían pasar más de 48 horas por ley, como lugares de reclusión permanente.
La ONG, que estima que la sobrepoblación en esas dependencias alcanza 400%, denunció que 65 personas (62 reclusos, un familiar y un policía) murieron en 2017 en choques por el control de los calabozos y por padecimientos asociados a la desnutrición y la tuberculosis.
En 2011 el gobierno puso en marcha un plan para adecuar los penales a estándares internacionales y terminar con la violencia entre grupos enemigos, pero los enfrentamientos siguen siendo habituales.
fuente CLARIN