En lo que a esta altura ya parece directamente una modalidad, el Gobierno buscará cerrar contra reloj entre hoy y mañana un acuerdo con la oposición peronista en el Senado para evitar la sanción de la ley que limita la suba de tarifas y retrotrae el valor de los servicios públicos a noviembre del año pasado. En el oficialismo en el Senado son moderadamente optimistas: creen que existe posibilidad de negociar e, incluso, no descartan que la sesión prevista para este miércoles pueda postergarse. Sin darse por vencidos, en la Casa Rosada, en cambio, admiten que vienen “corriendo de atrás” y que el tramite que les espera en el Senado asoma “bastante complicado”.
Con ese escenario, y en el que a toda costa el Gobierno busca impedir que Mauricio Macri termine pagando el costo político del veto a la ley, la última jugada del oficialismo fue no consensuar con el peronismo una sesión ordinaria para este miércoles en el Senado.
Así, el bloque del PJpidió una sesión especial para el miércoles 30 a las 14 para tratar la ley de tarifas. Cambiemos pidió otra sesión especial para ese día, pero con un temario diferente: el tratamiento de los tres proyectos que reemplazan el mega DNUde enero pasado de Mauricio Macri.
Aún en caso de no tener una sola disidencia, a la oposición le costaría juntar esa cifra. Es que el interbloque peronista Argentina Federal suma 24 senadores, a los que se sumarían los 9 del FpV, más probablemente el porteño Fernando Pino Solanas, la rionegrina Magdalena Odarda y la puntana María Eugenia Catalfamo. Si el también puntano Adolfo Rodríguez Saá asiste -estaba de viaje en el exterior y ayer no contestó la consulta de Clarín-, la oposición el quórum con lo justo.
Pero la suma es demasiado ajustada, más cuando se trata de una ley que el Gobierno busca evitar. Es más: hay un ministro -el del Interior Rogelio Frigerio- al que se lo empoderó para evitar el veto presidencial.
A las conversaciones que la Casa Rosada volverá a tener a partir de hoy con gobernadores opositores se suma que ya la semana pasada hubo cuatro senadores del PJ -Rodolfo Urtubey, Dalmacio Mera, Guillermo Snopek y Carlos Espínola- que en un principio se resistieron a acompañar al resto de sus compañeros de bancada en la firma del dictamen de mayoría. Lo terminaron haciendo, aunque en disidencia.
Con que alguno de estos cuatro senadores se ausente en miércoles -o también Carlos Menem, que no asiste a todas las sesiones-, podría tambalear la sanción de la ley y el Gobierno ganaría tiempo. El martes, la bancada del PJ tiene prevista una reunión para tratar de consensuar una posición.
Más allá de lo del quórum, en el interbloque peronista dicen estar dispuestos a negociar modificaciones a la media sanción de Diputados. Pero que a la rebaja del IVA -que propuso el oficialismo sobre la hora la semana pasada- se debería sumar la transferencia de Edenor, Edesur y Aysa a la Capital y Provincia y además ponerle un tope a las subas de tarifas.
Es improbable que el Gobierno acepte todas esas condiciones.
fuente CLARIN
