Quienes pasaron el fin de semana unas horas con Mauricio Macri lo notaron golpeado y dolido por la situación de Angelo Calcaterra. El empresario habló el sábado con el Presidente y le adelantó que estaba decidido a presentarse en la Justicia para asumir que él ordenó los pagos ilegales en los años kirchneristas. Altísimas fuentes de la Casa Rosada revelaron a Clarín que el Presidente hizo luego una selectísima y reservada rueda de consultas y que esos llamados incluyeron a Elisa Carrió. La socia más temida de Cambiemos le habría hecho llegar un mensaje a Macri: «Es lo mejor que puede hacer».
El primer mandatario pidió este lunes que lo mantuvieran informado de todo lo que pasaba en torno a la causa que sacude al país. «Le tengo un gran afecto a mi primo. Esto le hace bien al país. Esto es el cambio», se confesó frente a uno de sus funcionarios más importantes. En rigor, la decisión del primo fue más que meditada y sucedió después de que cayera preso el ex CEO de IECSA, Javier Sánchez Caballero. Su situación ya era muy delicada.
Horas antes, Macri había hablado públicamente por primera vez sobre la aparición de los cuadernos de Oscar Centeno, el ex chofer de Roberto Baratta. Celebró que “haya salido a la luz” el caso y apuntó contra el peronismo por no avanzar con el desafuero de Cristina Kirchner en el Senado.
“En general, celebro que todo haya salido a la luz. No hay dudas de que esto es bueno para la sociedad. Nos habla de que hay un cambio profundo. Hoy las cosas salen a la luz porque elegimos la transparencia y la verdad. Cosas como estas han hecho que no hoy tengamos los puentes, las rutas, las escuelas y la energía. Es muy importante que la verdad salga a la luz”, aseguró en una entrevista con radio FM Victoria 102.1 de Virasoro, provincia de Corrientes.
El Presidente buscará de ahora en más capitalizar la movida que lideran el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli, pese a los riesgos que algunos integrantes del propio Gobierno advierten sobre el inesperado rumbo que podría tomar el expediente y al efecto que eso podría provocar en su propio seno familiar. Su mesa judicial, comandada por el ministro Germán Garavano, se mantiene on line desde que estalló el escándalo. «Es la oportunidad para demostrar que somos distintos», razonan. De paso, la inflación y la tensión cambiaria quedan relegadas en la agenda.
En Balcarce 50 comienzan a detectar que la causa copará la escena mediática por un largo tiempo y no descartan que se convierta definitivamente en un lava jato. El rating en TV, incluso a la hora de los programas que suelen estar más pendientes del espectáculo, es una señal que nadie pasa por alto en el poder. «Esto le atrae al tipo común, al que no llega a fin de mes y ve que se la robaron toda», especulan quienes monitorean medios y comunicación.
El ala política teme que el futuro oscuro que asoma sobre Cristina sea una trampa para el deseo reeleccionista de su jefe, pero la estrategia hoy pasa por tratar de arrinconar a la ex presidenta en el Senado. Más allá de la grieta electoral, siempre comandada por Jaime Durán Barba, lo que está pasando en los Tribunales podría ser funcional a los intereses del Ejecutivo para que la oposición cierre filas detrás de la aprobación del Presupuesto 2019, que contempla un fuerte ajuste. «¿Con qué cara nos van a negar que estamos tratando de ordenar el caos que nos dejaron?», decía por la tarde un encumbrado diputado oficialista.
Macri también pareció apurar a los líderes del PJ. «Estamos todos a la espera de saber su posición. En principio han dicho que no al desafuero, insisten en una posición que a muchos nos cuesta entender”, cuestionó. Al pasar, recordó que el justicialismo “tiene mayoría” en el Senado. Dardo destinado a Miguel Angel Pichetto, con quien el vínculo sigue aceitado pero ya no es lo que era hace unos meses. Pichetto es la llave para que el interbloque de Cambiemos junte los votos para allanar los domicilios de la ex mandataria y luego de la declaración indagatoria avanzar con el desafuero, si se confirma que el juez irá por ese camino. El rionegrino, por ahora, resiste.
“No sólo robaron el dinero y las oportunidades. Ha sido demasiado de un ‘sálvese quien pueda’”, sostuvo Macri, en un tono muy parecido al que exhibe en campaña.
fuente CLARIN